Tras el varapalo sufrido el pasado año cuando la candidatura de Córdoba fue rechazada, esta vez sí ha sido posible.
La decisión del comité de la Unesco ha sido un mero trámite y el informe no ha contado con ningún tipo de objeción ya que el órgano subsidiario había recomendado hace un mes la inscripción de la fiesta cordobesa más singular.
La Fiesta de los Patios es un ejemplo de punto de encuentro entre culturas, de pervivencia y recreación de valores de colaboración y solidaridad vecinal.
En mayo, las casas-patio de Córdoba abren sus puertas para ofrecer a los visitantes un espectáculo floral que es fruto del esfuerzo vecinal de todo un año.
Un valor, el del esfuerzo compartido, el de la solidaridad ciudadana que merece todo reconocimiento porque rescata valores cívicos y sociales muy importantes, al tiempo que alimenta y reverdece tradiciones culturales muy valiosas.
Ahora la Fiesta de los Patios, se suma a la dieta mediterránea, al flamenco, a la samba brasileña y al tango argentino, en su reconocimiento por la Unesco.