En nuestro trabajo se dan situaciones que pueden desestabilizarnos. Cuando somos capaces de avisar a nuestro cerebro con alertas fáciles, rápidas y sencillas, logramos esquivar nimiedades. Muchas veces, estas alertas nos permiten motivar y enorgullercer a las personas que colaboran con nosotros.Ismael es Director Técnico de de una multinacional. Está en su despacho preparando un informe y suena su móvil. Mira quien es: “grrrr!!!!!...pesados...”
- Hola, Marta
- !!Hola Ismael !! ¿tienes un minuto?...es que...
- Sí, dime, Marta.
- Oye Ismael, te comento; es de la obra que váis a empezar mañana, ¿sabes?, eso de la ampliación del departamento de anàlisis. Ha salido un pequeño problema; no es nada pero.....
- Marta, la obra la lleva Pepe, nuestro aparejador.
- Sí, ya....pero es que.....prefiero que lo mire alguien con visión global de la jugada...es una cosa sin importancia, y creo que con una pequeña mampara se arregla, así me evito decirle a Juan que tiene que fimar la petición y todo ese rollo. Si dispones de un minuto, vienes y te lo enseño.
( Cerebro de Ismael. Warning: la obra se empieza mañana, la lleva Pepe, y esta tonta le llama la tarde del día de antes a él. )
- Marta, creí que te referías al minuto telefónico; estoy a punto de entrar en una reunión. Te llamo mañana.
- Ah!....oye oye! , ¿puede ser a primera hora?
- Procuraré; me llaman, Marta.
Ismael mira el teléfono móvil, sonríe, y marca un número abreviado:
- ! Hola, jefe ! , fregaos Pepe al habla; dígame usted.
- Me acaba de llamar Marta, ¿qué le pasa ahora?.
- ¿Te ha llamado a ti ?; son lo que no hay. Es para flipar, jefe; no me ha dejado ni tiempo para contártelo. Lo de siempre; estas niñitas quieren jugar a temas de obra, el otro pasa de todo, y luego pastelazo. Cuando nos dieron las necesidades de los espacios, olvidaron pedir un almacenillo para acopiar unas cajas con documentación confidencial de la cúpula. Ahora no sabe cómo arreglárselas para no tener que hacer un extra de obra. Yo le he dicho que no le pongo ningún “chambao”, porque ahí van a ir cosas de valor y luego, como siempre, el muerto para nuestro departamento. Jefe, estas cosas me sacan de mis casillas. !Y encima te llama a ti directamente!. !Tiene guasa el copetín!.
- Quiere que lo vea yo mañana con ella, así que prepárate, mañana a las ocho tomamos café y nos vamos para allá.
- Un día me van a cortar el pescuezo, jefe.
- Y yo luego se lo llevo en volandas a tu mujer.
- Eres demasiado, Ismael. Venga, a las ocho en el bar de la rubia.
- Hasta mañana, Pepe. Oye!, ¿a qué hora es el partido de esta noche?.
Aprendiendo de Pepe e Ismael :
- Llamada de Marta........los procesos que no siguen sus vías normales, algo tienen de raro; por eso Ismael le dice a Marta que tiene una reunión (si quieres reforzar tu imagen personal, no estés a disposición de la “secre” del director general).
- Ismael no va a ir sólo, se lleva a Pepe. Un buen líder no acepta a su gente, sino que los lleva en el corazón.
- Un buen líder hace que sea su equipo quien realiza el trabajo; él da cuatro pinceladas, reparte humanidad, y desaparece.
- Si aspiras a ser más digno, piensa que el responsable de tu departamento no hace las cosas porque sí; ayúdale.
Muchas veces, las alarmas de incendios se aprenden con la experiencia, pero únicamente los buenos líderes crean los mecanismos necesarios para dividir la presión vertical que reciben en las sub-presiones adecuadas a cada persona del equipo.