Esta historia fue llevada al cine en 1956 con el apropiado título de "El hombre que nunca existió", con Ronald Neame en la dirección e interpretada por Clifton Webb y Gloria Grahame.
Esta historia fue llevada al cine en 1956 con el apropiado título de "El hombre que nunca existió", con Ronald Neame en la dirección e interpretada por Clifton Webb y Gloria Grahame.