Y una carga de pólvora, que es lo que acaba explotando. Sí, estoy haciendo una nueva metáfora, poco afortunada, con la situación actual en este país, bautizado por los fenicios como la tierra de los conejos (aunque hay una divertida polémica en torno a este asunto). Bueno, como siempre, me desvío del tema, que soy mucho de eso. El asunto que me ocupa es porqué este petardo no ha estallado.
Pues como digo en el título del post, los petardos necesitan una mecha. Y parece que esta aún no está colocada. La carga de pólvora, por otra parte, es cada vez mayor, como si alguien quisiese que nuestro petardo de cinco pesetas (que recuerdos) se transformara en un cartucho de dinamita, bastante más peligroso y con capacidad para derribar las columnas del estado. Desde el caso Bárcenas, en el que se intuye una financiación irregular del PP a base de sobornos por la adjudicación de contratos, pasando por el rey, su yerno y las malas compañías, hasta los eres andaluces o el funcionamiento de la justicia dependiendo del acusado. También está el paro, la crisis y la falta de estímulos para los jóvenes y no tan jóvenes, que dudan entre dejar el terruño o mantenerse aquí a costa de vivir a costa de las pensiones de sus abuelos. Podríamos hablar de más problemas pero yo creo que sólo con esto llegaría para que la cosa saltara.
Pero no, falta una mecha y una fuente de calor que la incendie. Eso es lo que los está salvando. Pero en cualquier momento se les puede ir la mano con los recortes, una súbita subida de algún producto, el cierre de una televisión pública, una muerte en una manifestación o que sé yo. Mientras tanto el presidente se cuida de no acercar demasiado el mechero.