♣Título: Los rebeldes de Crow
♣ Autor: Javier Márquez Sánchez
♣Traductor: --
♣Género: Fantasía, Juvenil
♣Editorial: Editorial Hidra
♣ Número de páginas: 335
♣ ISBN: 978-84-92939-36-7
Su peligrosa afición, allanar edificios abandonados, ha permitido que Sara conozca a un par de jóvenes aventureros, Álex y Ray. El trío se ha citado al caer la noche en un antiguo balneario abandonado, en el que harán un terrible descubrimiento. Lo peor, sin embargo, les espera a la salida. Pequeños detalles que no recuerdan, gestos extraños que delatan a sus seres queridos, y una atmósfera cada vez más asfixiante: algo ha cambiado. Algo inexplicable que ha convertido el mundo en un lugar intrigante y hostil.
Los rebeldes de Crow llevaba ya un buen tiempo en mi poder, esperando a ser devorado por mi instinto lector. Sin embargo, por cuestiones del corazón (o más bien de la mente, para qué engañarnos), no me sentía con ánimos para leer. Un buen día, aquella mirada vacía y a la vez desesperada me atrapó. Tuve que coger el libro en un impulso y, acariciando sus solapas llenas de relieve, me sumergí en una lectura que prometía ser apasionante. ¿Y sabéis qué? Lo fue, pero no todo es un camino de rosas.
Podría decirse que, Sara, Álex y Ray, son tres amigos comunes y silvestres. O Casi… y decimos casi porque el mayor de sus pasatiempos es allanar propiedades privadas. No, no son ladrones, ni tampoco gamberros, simplemente adoran colarse en lugares abandonados y recorrer los recuerdos que alguna vez vivieron en ellos. Un día inesperado, tan normal como cualquier otro, llegaron a un casa abandonada, una como tantas. Allí, en su interior, encontrarían algo que les cambiaría la vida para siempre: un cadáver. Pero no un cadáver cualquiera, una trampa se esconde en su interior y ellos caerán atrapados ante ella, viajando a un lugar (o un mundo) que jamás quisieron conocer. Y es que muchas veces, la curiosidad, mató al gato (o a los gatos en este caso).
Los puntos positivos de Los rebeldes de Crow son variados pero tengo que destacar sobre todo una lectura amena y lijera en toda regla. Javier Márquez Sanchez tiene una pluma ágil y ya experimentada que nos facilita el viaje hacia ese extraño mundo distópico en el que los protagonistas se ven atrapados. Nos sumergimos en la trama de inmediato, así que podemos olvidarnos de principios lentos o pasajes largos y tediosos, mezclados con la típica escena de la chica babeando por el chico en el instituto. Olvidaos de eso porque en esta novela no hay institutos y tampoco hay largos romances producidos por la tensión sexual no resuelta. Los personajes son variopintos y retratan características diferentes del ser humano, no nos aburriremos con sus historias, aquellas que irán apareciendo lentamente en la trama; y por supuesto, el argumento principal es atractivo y adictivo. Las realidades paralelas o los viajes metafísicos son, sinceramente, un mundo inexplicable lleno de variantes y este autor demuestra tener muchísimas ganas y entusiasmo en ofrecernos algo diferente. Otra de las cosas que me gustó, aunque hay que reconocer que no es el punto más fuerte de la novela, fue el romance que se desarrolla avanzado el libro. Se hace latente de una forma sorpresiva y, a pesar de haberse forjado en las bases del “amor a primera vista”, me gustó que se reservara para el final y que la trama no girara entorno a él.
Sin embargo, y aunque no soy amante de las largas introducciones, este libro peca de ir “demasiado” rápido. He llegado a sentir que los personajes no se desarrollaban de manera correcta y que habían grandes vacíos en la trama, debilitando el núcleo de ese Nuevo Mundo. No os puedo adelantar demasiado, pero os daré alguna pista: se supone que en este nuevo mundo, tal y como sucedía en La Naranja Mecánica con la Ultraviolencia, la gente está muy desquiciada y acude a la mala educación, a la crueldad y a la indiferencia para afrontar el día a día. Esto está bien en teoría, pero a la hora de la práctica, los “insultos” o muestras de “crueldad” me supieron a poco. Creo que el autor pudo haber arriesgado más y tal vez se dejó llevar con eso de que “los jóvenes son sensibles y no podemos hablarle con franqueza” porque nuestra propia realidad es aún más chunga que la de este Nuevo Mundo. Por ejemplo: cuando el padre de Sara, en este nuevo mundo horripilante, la insulta, me quedé con cara de Póquer. Una chica nacida en este mundo no pararía de reír al escuchar semejantes niñatadas. Sinceramente pienso que debería haber metido más chicha ahí y haber dejado los algodones para otra ocasión. Y por último, tendría que comentar que el título de la novela, aunque es genial, en el libro cobra poca importancia. Y es que Crow, el personaje al que hace alusión la portada del libro, es uno de los menos relevantes en la historia. Sara tiene muchísimo más protagonismo y, finalmente, con todo lo que pasa en la historia, es mucho más valiente e importante.
Los rebeldes de Crow no es un libro perfecto pero el autor ha tenido muchísimo atino al elegir la trama, los acontecimientos y los personajes. Todavía tiene que pulir su estilo y dejar de acotar tanto las decisiones de sus protagonistas, pero de resto, creo que esta, su primera incursión en el mundo de la LIJ, ha allanado muchísimo un camino en el que, estoy segura, seguirá recogiendo y cosechando muchos éxitos.
And with a love like that… You know you should be glad