La escultura se yergue frente al Instituto de Citología y Genética de la Academia de Ciencias de Rusia, creada por Andrei Kharkevich, fue completada 2013 y bautizada como Monumento a los ratones de laboratorio. Sobre ella su autor expresó: " Combina tanto la imagen de un ratón de laboratorio y un científico, ya que están conectados uno con el otro y sirven a la misma causa."
La gigantesca obra de bronce tardó una año en ser completada y muestra un laborioso ratón, altamente concentrado, con las gafas descansando en el puente de la nariz mientras con sus manitas teje habilidosamente, pero no teje cualquier cosa, el enorme roedor está dando forma a una doble cadena de ADN. Como han hecho los animales a los que conmemora, y a los cuales también debemos agradecer nuestros avances científicos.