Los secuestradores amenazan con matar a Enric

Por Lvix


Copio del DEIA:
El grupo que tiene en su poder al cooperante de la ONG vasca Mundubat, Enric Gonyalons, ha amenazado con acabar con su vida en represalia por las negociaciones que por su liberación mantienen con representantes del Gobierno español. “España retrasa cada ronda de negociaciones para satisfacer nuestras exigencias y esto hace que la vida de Enric Gonyalons se acerque a su fin”, señaló Adnan Abu Walid, en nombre de Al Qaeda en el Magreb Islámico. “España debe entender nuestro mensaje. Toda la responsabilidad será suya”, añade Walid, quien finaliza diciendo que la prueba de falta de interés en la negociación por parte española es que “ninguno de los presos políticos ha sido liberado en Mauritania”. Walid se refiere a que una de las exigencias de los secuestradores es que varios islamistas detenidos en Mauritania sean puestos en libertad y otra sería la entrega de una fuerte cantidad de dinero -que estaría en torno a los 30 millones de euros-.

El mensaje le fue enviado a un periodista que trabaja para la agencia France Press en Bamako, capital de Mauritania.

SECUESTRADOS EL 23 DE OCTUBRE
Enric Gonyalons y Ainhoa Fernández fueron raptados en los campamentos saharauis de Tinduf (Argelia), el 23 de octubre de 2011 y desde ese día ha ido creciendo la incertidumbre por la situación política en Mali y su repercusión en las gestiones desarrolladas para lograr la puesta en libertad. Fernández y Gonyalons fueron secuestrados junto a la también cooperante italiana Rosella Urru en la noche del pasado 22 al 23 de octubre y trasladados a algún lugar del norte de Mali.

El Ministerio español de Asuntos Exteriores y de Cooperación mantiene la discreción en torno a las acciones que lleva a cabo para tratar de poner fin al secuestro. No obstante, el titular del departamento, José Manuel García-Margallo, admitió el mes pasado que el golpe militar en Mali sobrevino cuando se estaba, según sus palabras, “muy cerca” de conseguir una solución para liberar a los dos cooperantes.

Según García-Margallo, el intermediario con el que estaba trabajando el Gobierno español “desapareció” después de que los militares sublevados se hicieran con el poder, aunque la zona norte del país se mantiene bajo control de los grupos tuaregs.

A pesar de este contratiempo, el ministro se mostró confiado en un feliz desenlace sin dar pistas de si podría ser a corto plazo. Desde la plataforma que agrupa a las ONG que trabajan en los campamentos de Tinduf (Ceas-Sahara), se valoraba la actuación del Gobierno -Se está haciendo todo lo posible”, reconocían-, sin embargo, admiten que el golpe en Mali no estaba facilitando las cosas.