En una de las frases más célebres de la icónica, original y emblemática película de David Fincher “El club de la lucha” se dice lo siguiente: “Cuando se padece de insomnio, nada parece real. Las cosas se distancian. Todo parece la copia de una copia de otra copia". Y el hecho cierto es que, de un tiempo a esta parte, ir al cine se está convirtiendo en una experiencia similar a la de padecer insomnio, porque se han generalizado las adaptaciones de cintas clásicas y las revisiones de grandes obras del Séptimo Arte. En definitiva, plagios de proyectos ya filmados que, convenientemente disfrazados, se ocultan bajo el manto de una pretendida modernización. Sin embargo, para quienes ya hemos visto mucho cine, la sensación de asistir a la enésima repetición, a “la copia de una copia de otra copia”, comienza a ser muy preocupante. Este estreno de “Los siete magníficos” es una versión del famoso largometraje de 1960, que a su vez era una adaptación libre de “Los siete samuráis”(1954), del cineasta japonés Akira Kurosawa. Su director, Antoine Faqua, siempre ha optado, con dispar fortuna, por un género de acción contundente, con manifiesto y excesivo despliegue de violencia en pantalla. Títulos como “Día de entrenamiento”, “Lágrimas de sol”, “El rey Arturo”, “Objetivo: La Casa Blanca” o “The Equalizer (El protector)” dan prueba de ello. Salvo alguna excepción, suele ser hábil en la recreación de situaciones de tensión y en el empleo del ritmo narrativo. Cabe preguntarse entonces qué le ha impulsado a involucrarse en un trabajo que cuenta una historia llevada ya al cine varias veces.
Trailer en castellano
Trailer en versión original
Datos del film
Película: Los siete magníficos.
Título original: The Magnificent Seven.
Dirección: Antoine Fuqua.
País: USA. Año: 2016. Género: Acción, western.
Interpretación: Denzel Washington, Chris Pratt, Ethan Hawke, Vincent D’Onofrio, Peter Sarsgaard, Byung-hun Lee, Haley Bennett.
Guion: John Lee Hancock, Richard Wenk, Nic Pizzolatto; basado en el guion de Akira Kurosawa, Shinobu Hashimoto y Hideo Oguni.
Música: James Horner.