Los Simpson: 20 años de Rock

Por Alberto C. Molina

El 17 de diciembre de 2009, la familia amarilla más popular de todos los tiempos cumplió 20 años.  Los Simpson, los dibujos animados creados por Matt Groening, llevan dos décadas haciendo reír con sus historias desde la ciudad de Springfield —la ficticia, no la del estado de Massachusetts—. Sus 21 temporadas y más de 400 episodios la convierten en la serie de animación estadounidense más larga y con el récord de permanencia en pantalla. Unos números que evidencian cómo ha conquistado con creces el cariño del público, el respeto de la crítica… e infinidad de galardones, entre los que destacan 25 premios Emmy, una estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood y la designación de “Mejor serie de televisión del siglo XX” según la prestigiosa revista Time.

Homer Simpson: «Todo el mundo sabe

que el Rock alcanzó la perfección en el 74,

es un hecho científico»

¿Pero por qué aparecen ahora en un blog de Rock? ¿Qué relación guardan con la música si puede saberse, si es que guardan alguna? Pues porque como dijimos en su momento cuando hablamos de Pressing Catch (Pressing Catch: Lucha y Rock), Homer, Marge, Bart, Lisa y Maggie también han contribuido enormemente,  a su manera, a hacer llegar el género a millones de hogares en todo el mundo. De este modo la familia ha compartido planos y sonrisas con figuras de la talla de Mick Jagger y Keith Richards, Sting, Peter Frampton, U2 o nuestros queridos Red Hot Chili Peppers. Momentos inolvidables que recordamos a continuación, pues 20 años han dado mucho de sí.

Ringo Starr:

Pinta con grandeza, temporada 2. En su juventud Marge pintaba, y no lo hacía nada mal, pero uno de esos profesores capaces de cortar la leche con solo mirarla hizo que se olvidara de ello. Unos cuantos años después retoma la vocación con el apoyo de su familia, incluido Homer, a quien  no le hace especial gracia encontrarse en el ático tal cantidad de retratos de Ringo Starr. Tanto le llegó a gustar a su mujer el ex Beatle, que le envió uno de aquellos cuadros junto con una carta, pero jamás halló respuesta… hasta ese momento. Y no sólo contesta amablemente Ringo, sino que, satisfecho con el retrato, lo añade a  su colección particular. La verdad es que Groening se portó bien con el músico, pues la caricatura amarilla mejoró el original.

Aerosmith:

El flameado de Moe, temporada 3. Homer le confía a su barman favorito una receta muy especial y éste, como buen amigo, le pisa la idea. En un abrir y cerrar de ojos, el flameado de Moe se convierte en la bebida estrella de la ciudad, y la taberna, en un hervidero de gente. Tan bien marcha el negocio que Aerosmith se encargan de amenizar una velada, entonando su célebre Walk this Way con Moe, o mejor dicho, “con los berridos de Moe”. La anécdota la protagoniza el batería Joey Kramer, cuyas baquetas están en poder de una Edna Krabappel ligera de ropa y con ganas de juguetear. Hoy en día la nota la habría dado Steven Tyler.

Sting:

Radio Bart, temporada 3. Bart gasta una broma a toda Springfield cuando lanza un walkie talkie a un pozo y finge que se ha caído Timmy O´Toole, un niño imaginario al que, según Bart, el director Seymour Skinner no aceptó en el colegio por ser pobre. Se acordona la zona, comienzan las labores de rescate, un cetrero se queda sin halcón, se levanta una feria allí mismo, pero no hay suerte. Timmy O´Toole se convierte en un héroe y Krusty El payaso reúne a un grupo de artistas para grabar una canción benéfica, y entre ellos, Sting, por aquel entonces (1992) trabajando en solitario tras la separación de The Police. Cuando Bart realmente cae en el pozo y se descubre la broma, no duda en acudir en su auxilio y ponerse a picar, aunque, como confiesa su madre, el pequeño no se cuenta entre sus admiradores.

Spinal Tap:

El Otto-show, temporada 3. Michael McKean (David St. Hubbins), Christopher Guest (Nigel Tufnel) y Harry Shearer (Derek Smalls), o lo que es igual, Spinal Tap, actúan en Springfield. Se trata del primer concierto de Rock para Bart, y a punto está de convertirse en el último. Todo marcha sobre ruedas hasta que a los británicos les falla el Satanás hinchable y un rayo láser ciega a uno de ellos. Ante el descontento del público se cancela el espectáculo  y se arma una batalla campal, mientras, en las inmediaciones, Homer tararea alegremente en el coche. Ilusionado con lo visto, Bart se compra una guitarra eléctrica pero no consigue sacarle el mejor sonido. No como Otto, el conductor del autobús escolar, quien demuestra a los niños cómo se toca y provoca la caída por un barranco de Spinal Tap.

Red Hot Chili Peppers:

Krusty es cancelado, temporada 4. La televisión es grande, pero no lo suficiente para cobijar a la vez a Krusty El payaso y al recien llegado Gabbo. Mientras que el programa de la marioneta acapara todo el público infantil, el de Krusty es cancelado.  Son Lisa y Bart los que le ayudararán a salir de la depresión y tirar de agenda para contraatacar con un programa especial. Y entre las estrellas invitadas, Red Hot Chili Peppers, con Anthony Kiedis, Flea, Chad Smith y la novedad de Arik Marshall, guitarrista de la banda entre 1992 y 1993, y con la cual hizo poco más aparte de la interpretación de Give It Away en este episodio.

Krusty logró que modificaran la letra de la canción, pero no pudo evitar esa puesta en escena tan “ligera”. Al final volvieron a aparecer, en esta ocasión en la taberna de Moe, y de nuevo lo hicieron en calzoncillos.

Krusty: «y cuando decís tengo lo que tengo

y voy a metértelo, ¿no podríais decir

me gustaría abrazarte y darte un beso?»