El Tottenham fulmina al colista de la Premier en un partido que desde el primer momento el conjunto de Harry Redknapp fue muy superior
Antes de que los jugadores saltasen al campo, los aficionados ya sabían a lo que venían: a ver al Tottenham ganar en White Hart Lane. Y así fue. Un gran Tottenham que desde el minuto 1 salió a ganar el partido, muy enchufado arriba y con un centro del campo bastante sólido, con la presión suficiente como para poder robar balones arriba, y así crear peligro, sacando varios córners a su favor gracias a esto.
El primer gol, llegó, en una conexión Modric – Bale en la que el croata cruzó un balón que llegó al galés, que había superado a su defensor. Tras encontrarse sólo ante el portero sólo tuvo que empujarla, y el balón logró entrar al fondo de la red.
Tan sólo cinco minutos después, el asistente del gol anterior, Luka Modric, recibió un mal rechace de la defensa del Wigan, y se sacó un disparo cruzado que poco pudo hacer el meta Al Habsi. Con el 2-0 en el minuto 34, los spurs consiguieron llegar al final del primer tiempo sin encajar ningún gol.
De vuelta en el terreno de juego, el Tottenham parecía que estaba todavía en la primera parte, pues sus jugadores acusaron poco el cansancio y lograron rendir a un nivel bastante alto hasta el final del encuentro. Un segundo gol de Bale, que recibió de Assou-Ekotto y disparó desde la esquina del área, dejó prácticamente cerrado el partido. Tan sólo un tímido gol del Wigan al final del encuentro, obra de Mc Arthur pudo hacer sombra a un inmenso Tottenham que está a un gran nivel esta temporada.
Tottenham: Friedel, Walker (Sandro 75), Kaboul, King, Assou-Ekotto, Kranjcar, Modric, Parker, Bale, Adebayor (Lancaster 78), Van der Vaart (Livermore 31).Banquillo: Cudicini, Dawson, Rose, Pienaar.
Wigan: Al Habsi, Stam, Boyce, Caldwell, Figueroa, Moses, Watson (Crusat 87), McCarthy, Beausejour, Gomez (McArthur 70), Di Santo (Sammon 74).Banquillo: Pollitt, Gohouri, Jones, Rodallega.
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