Quizá la especie más común en esta época es Lestes viridis, un caballito del diablo de tonos verdes y de buen tamaño con respecto a otras especies (4 a 5 cm de longitud) que se puede observar en muchas zonas de aguas tranquilas, como éste que localicé en el concejo de Salas.
Lestes viridis es un caballito del diablo de un color verde broncíneo y alas transparentes. Su característica más peculiar es que pone los huevos en arbolillos que crecen junto al agua, sobre todo sauces, donde pasan el invierno hasta que eclosionan la primavera siguiente. Su posición de reposo más habitual es con las alas abiertas, donde se puede observar su pterostigma de color blanquecino.
Los caballitos del diablo, a diferencia de las libélulas, no suelen alejarse de los cursos de agua. Las colonias de Lestes viridis pueden compartir hábitat en esta época con otras especies, como se observa en la foto de abajo, donde se puede observar un macho de Calopteryx virgo, apreciándose bien la diferencia de talla entre ambos.
En este caso, el ejemplar de Calopteryx virgo, a diferencia de los que refería en una entrada anterior, es azul muy marcado en lugar de verde y posee la base de las alas transparente y no negruzca, por lo que parece corresponder con la forma o ssp. meridionalis.