Los Vengadores (2012)

Publicado el 02 mayo 2012 por Quesito

El supergrupo.
Lo estábamos esperando. Después de que nos llegaran las películas, por separado, de la gran mayoría de los personajes que han acabado formando Los Vengadores, por fin ha llegado el momento de verlos luchando juntos. De las películas que preceden a la gran reunión actual encontrábamos alguna de interesante, alguna de correcta y, lamentablemente, alguna de soporífera. Lo que tenía claro es que ninguna de las cintas anteriores me había hecho vibrar como esperaba. Parecía claro, pues, que la última gran esperanza recaía en las sabias manos de Joss Whedon, quien parecía ser el único capaz de obrar el milagro. Y lo logró. ¿Cual es la diferencia principal entre esta película y todas las anteriores? Pues parafraseando al personajes de Will Smith en Men in Black: “¿Sabes cual es la diferencia entre tu y yo? Que yo hago que esto luzca”.
Definitivamente estamos ante una película que funciona. ¿Cuales son sus motivos? Porque tiene al mejor director posible para el proyecto; porque se lo cree; porque Whedon ama tanto a los personajes que incluso se permite el lujo de reírse de ellos; porque parecen haber tenido muy en cuenta a los seguidores de los cómics; porque todos los personajes tienen un importante peso específico dentro de la historia y su momento de lucimiento personal; porque si Iron Man ya era divertido en su película, en esta le colocan los personajes adecuados a su alrededor para que se convierta en un showman; porque por fin tenemos a un Hulk de rompe y rasga de verdad; porque cada vez que La viuda negra aparecía enfundada en cuero partiendo la pana, se provocaban erecciones generalizadas en la sala de cine; porque yo no sé si el prota de la serie “Cómo conocí a vuestra madre” encontrará finalmente a la mujer de sus sueños o no, pero que bien le queda el traje de Shield a su amiga; porque las hostias son como panes; porque la cinta logró arrancarme sonoras carcajadas, porque los efectos especiales son francamente espectaculares; porque la cinta tiene ritmo a patadas; y porque, en la cinta, las patadas tienen ritmo.
No obstante, si hay algo que no tiene la película es un argumento rebuscado. La trama gira alrededor de un cubo de energía de origen alienígena que cae en la tierra. Como el cubo es super poderoso no tardan en aparecer una serie de tipos malos que se quieren apoderar de él y una serie de tipos buenos que deberán impedirlo. Obviamente la cosa no consiste en coger el cubo y largarse a su casa, sino que primero se optará por someter a toda la humanidad a su merced, como es de rigor en estos casos. Ustedes ya saben como funcionan estas cosas. Así que un grupo de superhéroes formado con lo mejorcito de cada casa deberá velar para que, finalmente, el cubo no acabe cayendo en las manos equivocadas. Haciendo un ejercicio de imaginación, si cogemos el anterior argumento y cambiamos la palabra “superhérores” por la palabra “robots”, resulta que les acabo de contar el argumento de la película Transformers. Madre mía, la de cubos de energía que llegan a caer a la tierra. Que caprichoso es el destino.
Reconozco que el pasado viernes me dirigía a la sala de cine ilusionado ante el estreno de Los Vengadores, pero sin tenerlo del todo claro después de algún que otro sonoro batacazo provocado por alguna de las cintas anteriores. Mi única duda era saber hasta qué punto Joss Whedon habría podido tener carta blanca para poder realizar la película que el quería. Me costaba imaginar a los productores en plan: entreguemos estos doscientos cincuenta millones de dólares que nos sobran a este tipo con una sola película en su haber como director (considerada más de culto que taquillera) y cuyas dos últimas series de televisión fueron canceladas por falta de audiencia... pero si, eso es justamente lo que pasó.
Finalmente Whedon ha logrado que esto funcione. Y ha logrado que lo haga a un nivel altísimo. Y es que una vez hechas las presentaciones pertinentes, con los films de cada uno de los personajes por separado, la película entra en materia nada más empezar, contando con que el público ya conoce tanto a los buenos, como al malo (visto en Thor). Y al poco de empezar uno ya tiene la sospecha de que estamos ante algo distinto a lo visto hasta el momento. Es cierto que la acción puede bajar un poco justo después de la primera secuencia de acción, pero rápidamente la maquinaria vuelve a ponerse en funcionamiento para ofrecer al espectador todo un espectáculo de acción con certeros toques de humor (cien por cien Whedon), empaquetado en formato de blockbuster que hará las delicias tanto de los seguidores de los cómics como de los más alejados de ese mundo. Si tuviera que describir el film con una única palabra sería: espectacular. 
Resumiendo