"Los Viajes de Cristóbal Colón"

Por Ciencia

La Niña, la Pinta y el buque insignia, la Santa María fueron las tres naves que componían la pequeña flota con la que Cristóbal Colón emprendió su primer viaje a través del Atlántico para llegar al Nuevo Mundo. Eran unas embarcaciones relativamente pequeñas; la Santa María era carraca (nave de tres a cuatro mástiles) de tamaño mediano, media unos 36 metros de largo y pesaba unas 100 toneladas, mientras que la Niña y la Pinta eran carabelas (barcos más ligeros) de aproximadamente la mitad de tamaño. Todas ellas sobrevivieron a un viaje desde España hasta lo que hoy es Haití, Sin embargo, a pesar de ser la más grande, la Santa María no consiguió volver. Eran embarcaciones de segunda mano. Aunque las carracas estaban diseñadas para viajes largos no estaban preparadas para una exploración tan intrépida. La Santa María y sus dos hermanas partieron el 3 de agosto de 1492 con dirección a Canarias. La idea era aprovechar los vientos alisios del noreste que soplaban desde África y luego usar los vientos del oeste, predominantes en la zona de las Azores, para volver. Esta proeza de la navegación tuvo su recompensa, si bien Colón tuvo que navegar bastantes más semanas de lo que esperaba para llegar a lo que creían que era el otro lado del mundo. El 28 de octubre llegaron a lo que creían que era Cipango (Japón), pero en realidad estaban en Cuba. Tras una noche de celebración la Santa María encalló en lo que ahora es la Ciudad de Cabo Haitiano (Haití). Los daños fueron irreparables y Colón ordenó que la desmontaran para aprovechar los materiales para el nuevo asentamiento de Villa de la Navidad. La Niña y la Pinta emprendieron el viaje de vuelta a España. ZONA-CIENCIA