Los vídeos musicales más caros de la historia

Publicado el 28 abril 2015 por Dice La Canción @DLCancion
Si pensabas que las películas son las producciones audiovisuales más caras, estás a un paso de descubrir que no es así. Algunos videoclips han contado con presupuestos que no están al alcance de la mayoría de los filmes que se realizan para la gran pantalla en la actualidad.5 videoclips que han batido récord de presupuestoScream, de Michael Jackson. El vídeo musical más caro de la historia corresponde a esta popular canción del “Rey del Pop”. Este vídeo costó, nada más y nada menos, que 8,1 millones de euros y ha sido visto por más de 64 millones de personas a lo largo y ancho del mundo.Express Yourself, de Madonna. El segundo videoclip más caro de la historia pertenece a Madonna y costó la friolera de 7,1 millones de euros. El director del vídeo fue el famoso David Finch, que también ha dirigido películas como “La Red Social” y “El curioso caso de Benjamin Button”. Este vídeo se llevó en 1989 cuatro premios MTV y ha sido catalogado por la revista Rolling Stone como uno de los mejores del mundo.Die Another Day, de Madonna. La cantante norteamericana parece ser adicta a los grandes presupuestos, al menos en lo que a vídeos musicales se refiere. De hecho, el vídeo de este tema costó 6 millones de euros, y no es para menos ya que está inspirado en las películas de James Bond. En 2002 también recibió una nominación a los Premios Grammy.Bedtime Story, de Madonna. El presupuesto destinado a este vídeo fue de 5,8 millones de euros. Fue producido por Mark Romanesk, quien también dirigió el vídeo de “Scream” de Michael Jackson. Se trata del vídeo más experimental de Madonna, tanto es así que recientemente ha sido proyectado en una de las salas del Museo de Arte Moderno de Nueva York.Black or White, de Michael Jackson. La quinta posición en la lista de los vídeos musicales más caros de la historia pertenece al cantante estadounidense. Este vídeo musical que dura 11 minutos, ha costado 5,2 millones de euros y ha sido visto por más de 500 millones de personas en el mundo. El vídeo es una denuncia de los prejuicios raciales que todavía persisten y que el artista consideraba un grave problema contra el cual se debía combatir.