Jo, qué noche con Los Zigarros en Aluche. Todo vuelve a su punto de equilibrio: el Real Madrid ganando Champions y nosotros con cuerpo de verbena. Es así exactamente como recordaba que era. Y así sigue siendo. Riadas de gente por las calles en una madrugada ruidosa como las de antes. Calor, celebración, rocanrol. De eso va todo esto.
Aperitivo, comida, vino blanco, copa, chupito, puro y Los Zigarros. Es una secuencia de palabras formidable. No supimos del todo que éramos los mejores mientras lo fuimos. Solo lo intuimos. Seguramente porque así sigue siendo. Tú, yo, nosotros. Las gentes de Aluche y aledaños. A esos me refiero. Jo, qué noche, ya lo dijo Martin Scorsese.
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'A todo que sí'. 'Apaga la radio'. 'Baila conmigo'. Vamos a portarnos mal. De estas cuatro cosas tres son títulos de canciones de Los Zigarros. La otra debería serlo. "No te lo tomes como una broma cuando tu chica tiene una porra de goma", gritamos. Aullamos, nos pisamos, derramamos cerveza, nos contoneamos y, al mismo tiempo, nos apoyamos los unos contra los otros.
Ser de Los Zigarros y de Aluche es una bendición. Que coincida con una noche de esas locas de Copa de Europa es un manicomio en el que nadie lleva camisa de fuerza y todos llevamos tijeras. Una mala idea. Pero sale bien. Razonablemente bien. Nos va el rollo. La ciudad está a punto de explotar con todos nosotros dentro. 'No obstante lo cual' me sigue gustando el cabaret.
Hay un instante que me llevo. Es durante 'Dentro de la ley', al trote. Álvaro lleva la Gibson Les Paul. Adopta la pose, se abre de piernas a lo Slash. Y le da serrucho. Bramo. Y ya estaría. Todo el día estaba enfocado, sin yo saberlo porque seria un rollo, a este preciso momento. Grito. Casualmente, estaba grabando un vídeo, así que ahí está mi verdad, ahora cuéntame la tuya, que decían los maníacos galeses. Era aquí y ahora.
PARQUE ALUCHE, HISTORIA DEL ROCK
No puedes encender un fuego sin una chispa, lleva cantando Bruce casi cuarenta años. Los Zigarros son la chispa, nosotros la mecha. De manera que el Parque Aluche arde. Literalmente, ajusticiado por el sol. Sus gentes arden. Han vuelto las fiestas del barrio, aquellas en las que antaño se hacía de día viendo a Topo, Asfalto, Panzer, Alcaudón, Sangre Azul, Muro, Banzai, Bella Bestia o Sobredosis.
Yo no estaba allí, me lo acaba de contar gente con mucha jerarquía. Medallas y galones. Pero por allí vimos en su día a sin canas, , , Reincidentes con Porretas, La Frontera con La Guardia, Siniestro Total, Medina Azahara y otros miles. Las fiestas de Aluche son el latido de una ciudad que está ansiosa.
Vivimos con ganas de reencuentros inesperados entre la multitud. Caras familiares que te sonríen que estás en el momento y el lugar indicado. Fumándote en una noche tres paquetes de Zigarros con el volumen al once. Y anoche era un tigre, hoy soy un ratón. Chimpón.