Love to Food se afianza como propuesta gastronómica de calidad dentro de un festival musical
El pasado fin de semana Love to Rock despedía su quinta edición con la cifra de 18.000 asistentes en La Marina de València
Como gran novedad este año, la zona gastronómica creció en número de participantes con 5 chefs con Estrella Michelín y un escenario musical propio
Las chefs Begoña Rodrigo, Alejandra Herrador, Roseta Félix, Carito Lourenço y el chef Germán Carrizo adaptaron sus propuestas de alta cocina al formato portable para disfrutarlo en la zona de comidas o viendo un concierto
El festival musical Love to Rock que da la bienvenida desde La Marina de València al otoño en la ciudad, se despidió el fin de semana pasado con 18.000 asistentes totales y afianzó su apuesta por acercar la cocina de calidad al entorno de un festival musical con la propuesta de Love to Food.
Esta edición, el público, además de haber vibrado con las actuaciones de La Habitación Roja, Niños Mutantes, Sidonie, Dorian, Sidecars, La La Love You, La Casa Azul, Mujeres o Ginebras entre muchas otras, también ha podido disfrutar de la zona gastronómica Love to Food, que crece en su tercer año, con la mayor participación de cocineros y cocineras, 5 chefs en total y todos con Estrella Michelín; una amplia zona de mesas y sillas; y un escenario musical propio.
Begoña Rodrigo, chef del Restaurante La Salita (Valencia) con 1 Estrella Michelin y 3 Sol Repsol; Alejandra Herrador, chef del Restaurante Atalaya (Alcossebre) con 1 Estrella Michelin y 2 Sol Repsol; Roseta Félix, chef del Restaurante Fraula (Valencia) con 1 Estrella Michelin y 1 Sol Repsol; y Carito Lourenço y Germán Carrizo chefs del Restaurante Fierro (Valencia) con 1 Estrella Michelin y 1 Sol Repsol; han sido los protagonistas de este año de Love to Food y han adaptado sus platos de alta cocina al formato portable con el objetivo de que los asistentes coman bien y con calidad en el entorno de un festival de música, además de a precios asequibles. Una apuesta única en la Comunidad Valenciana y que todavía es poco común en el resto de festivales nacionales; una propuesta que también pretende democratizar la alta cocina y acercarla al ámbito de un festival musical, donde además de disfrutar de conciertos, puedes comer muy bien.
El viernes, Begoña Rodrigo cocinó entremuslo de pollo frito, arroz aromatizado y salsa de cacahuetes del collaret con cebolla encurtida; y guiso thailandés de tubérculos de otoño y champiñones. Por su parte, Germán Carrizó ofreció empanada de vacío ahumada y verduras braseadas; y choripán relleno de queso y chimichurri de algas. El sábado, Roseta Félix trajo pan indio relleno de butterchicken y mayonesa de siracha; y croquetón fluido de patata y pico de gallo. Alejandra Herrador, noodles en curry Thai casero con mejillones; y FacuTaco de Vermuda (taco de cochinita pibil). Y Carito Lourenço, repitió la empanada de vacío ahumada y verduras braseadas de su compañero Carrizo; y Portbello Smash Brioche, con queso al Chimichurri.
Ambos días, en carta se podía degustar vino Rebel.lia Selección Especial; en la barra de Maillard, agencia valenciana especializada en cocina con fuegos, hamburguesa especial Love to Rock, bocadillo de pastrami, coca de verduras y patatas gourmet; y también la oferta se ampliaba con una cuidada selección de foodtrucks.
Para seguir aportando valor a Love to Food, este año la zona ha contado por primera vez con programación propia en su Escenario Gastro, con sesiones de Djs y actuaciones musicales, lo que ha dotado de más valor a esta zona incluyéndola como parte muy importante e imprescindible dentro de la programación de Love to Rock.