La típica historia de amor de la infancia: Solidea es una niña de ocho años que se enamora de Edoardo, el chico guapo del colegio, unos cuantos años mayor que ella… Sin embargo, la diferencia de edad hace que este primer amor se desvanezca con el tiempo. El típico fracaso amoroso: Han transcurrido quince años y Solidea ya no es la niña ingenua y enamoradiza del pasado. Otra relación de nueve años ha acelerado ese proceso y ahora que todo ha terminado, tiene roto el corazón. El típico reencuentro: Este último fracaso sentimental lleva a Solidea a acordarse de aquel irresistible adolescente del cual estuvo enamorada: Eduardo. Y gracias a Facebook, el cupido del siglo XXI, empieza una aventura romántica, una historia contada a dos voces, llena de giros imprevistos que refrescan la trama. Simona Sparaco se ha inspirado en la red social más famosa del momento para contar una historia de amor absolutamente contemporánea.
La típica historia si, de esas que esperas mucho mas de ella y se quedan haciendo aguas como la chica de la bañera, con unos personajes que se les ve venir a la legua, por no decir que me anticipe a todas sus frases, a todos sus pensamientos y a todos sus gestos, predecible hasta la saciedad y leerlo se convirtió en mi pesadilla, pero no podía dejar de sentirme culpable por dejar otro libro sin terminar, así que, de un suspiro me lo termine,si, pensáis a lo mejor que ando divagando pero no se si os ha pasado que cuando queréis que algo se termine o acabar algo lo hacéis con mas ganas con mas fuerza y cuando os dais cuenta todo ha pasado, pues eso. Lo único que se salva de "Lovebook" fueron los personajes secundarios, el amigo gay de Solidea, que tiene unos puntazos increíble y el amigo ligón de Eduardo, ¡ah! sin olvidarme de la ex de este ultimo, son los únicos que han podido crear un poco de expectación, de sonrisas y de alegría a mi lectura. Mirad que lo cogí con ganas, pero estas o yo (No se exactamente cual) se fueron desinflando paso a paso. La autora podía haber dado mas giros de los que da al final, ¡Si al final! ¡No en el principio o en el medio! tuvo que esperar hasta casi los dos últimos capítulos para tenermes en ascuas, con las uñas mordidas y diciendo ¡Madre de Lord! ¿Que pasara? No me he vuelto loca, simplemente he sacado al Lovebook que llevo dentro y sin contaros nada de lo que pasa pues la sinopsis ya es significativa, me he explicado como mejor he podido, sin parecer Yoda. Un libro que si no tenéis que leer, os puede servir o si queréis una historia en la que el final es lo mejor y el principio es para tirarse de los pelos.
-Tocate la nariz, si no, nos casamos-me dice Clothilde, e intercambiamos una sonrisa mientras nos frotamos la punta de la nariz con los dedos.