EL CUERPO DE ELLA TIENE SU TIPÓGRAFO
habla de lo que no da que hablar
de tu espíritu perfectamente cerrado por la carne
pero mi despertado dedo está leyendo
el verso de tus pezones de tu vello de venus de tu talle te lee
la vida es un cajista sin su caja
su cursiva es el placer de que gozar
y es bello todo lo oblicuo en sesgo
el amor destruye la presión de lo rígido lo recto
el amor deroga todas las presiones
la poesía que tiene labios de sangre
tu boca vive de mi boca
hablan de lo que no da que hablar
YO LA TIERRA Y LAS MUJERES
tormenta de iracundas plegarias mis poemascortos pero con largas garras de maliciasel pecho al que los árboles confían sus problemassin hablar se va a abrir para mi árbol de noticias
ramas como escaleras con que desenvolverlos pliegues de la fecundidad de las palabraslas mujeres que me han ido escuchando con gran feroble enroblecedor de la mujer me llaman
y las mujeres cultivan la sabiduría con amorellas ponen el pan de la existenciay yo fermento el vino de la rebelión
Lucebert en Antología (Plaza & Janés, 1978)
Versión de Francisco Charrasqueo.