Pinchos recién llegado
Ha sido el cumpleaños de Mr. Paulson y sus padres le han traído algo que él quería y ansiaba con fuerza: un cáctus. Es uno de esos cáctus con brazos, como los del desierto, en una maceta preciosa, justo lo que él venía pidiendo desde hace mucho mucho tiempo. De hecho, cada vez que íbamos al Ikea, iba corriendo a la zona de plantas a ver los cáctus y soñar que podía llevárselo a casa. Pero claro, un cáctus grande es caro y nosotros somos una pareja low cost.
Bien, pues ahora tenemos un precioso cáctus del desierto en casa y se ha abierto otra batalla entre nosotros. Todo comenzó cuando él dijo que pensaba llamar a la planta “snowdog-segundo-no-se-qué-más-pero-un-nombre-muy-feo” y yo dije tan feliz “pues yo pienso llamarle “Pinchos“. Así fue:
-Se va a llamar “snowdog-segundo-no-se-qué-más-pero-un-nombre-muy-feo”.
-Pues yo voy a llamarle “Pinchos”.
-No, no vas a llamarle Pinchos porque no se llama así.
Querido Pinchos…
-A mí me da igual, ese nombre que le has puesto es impronunciable y muy feo y yo voy a llamarle Pinchos… Pinchos… como el cáctus de los Fruitis… Pincho, Mochilo y Gazpacho… yo le llamo Pinchos que mola mucho más…
-Que no! Que no se llama Pinchos!
- Pinchos es mucho mejor… es sencillo, directo y divertido… puro márketing! Se llamará Pinchos… jajajaj
-Es mi regalo y se llama como yo digo… anda sal del coche y cuidado con Pinch…. digo, con “snowdog-segundo-no-se-qué-más-pero-un-nombre-muy-feo”…
-!Le has llamado Pinchos!! ¿Ves? ¿Ves cómo es mucho mejor nombre?
Lucha por el amor de Pinchos
Y así ha comenzado la guerra… ahora luchamos por el amor de Pinchos, nuestro nuevo amigo en la casa que no puede morir. Por cierto, la orquídea mutante falleció… que pena… esperemos tener más suerte con Pinchos porque mola mucho más.
¡Bienvenido a la familia querido Pinchos!!
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