- 28 noviembre 2014
Durante un reconocimiento del área, el paleoantropólogo Donald Johanson descubrió un pequeño trozo del hueso de un codo.Inmediatamente se dio cuenta de que era un ancestro humano. Y encontró muchos restos más."Cuando miré hacia mi izquierda vi pedacitos de un cráneo, un trozo de mandíbula y un par de vértebras", dice Johanson.Era evidente que el hallazgo del esqueleto representaba un hito: los sedimentos de la zona tenían 3,2 millones de años de antigüedad."Me di cuenta de que era parte de un esqueleto de más de tres millones de años", explica el científico.Era el homínido más antiguo que se había encontrado.
Cuando miré hacia mi izquierda vi pedacitos de un cráneo, un trozo de mandíbula y un par de vértebras. Me di cuenta de que era parte de un esqueleto de más de tres millones de añosDonald Johanson, paleoantropólogoMás tarde también se supo que era el más completo: el 40% del esqueleto se había preservado.Por la noche, en el campamento, Johanson puso un casete de los Beatles que había traído y "Lucy in the Sky with Diamonds" comenzó a sonar.Debido a su tamaño, Johanson creía que el esqueleto era de una mujer."¿Por qué no la llamas Lucy?", le dijo alguien.La sugerencia cayó como anillo al dedo."De repente", recuerda Johanson, "ella se convirtió en una persona".
Preguntas
Pasaron unos cuatro años hasta que Lucy fue descrita oficialmente.Pertenecía a una nueva especie llamada Australopithecus afarensis y era evidente que era uno de los fósiles más importantes nunca antes descubierto.El niño de Taung
Aunque era una nueva especie, Lucy no fue el primer Australopithecus hallada. Fue el niño de Taung, un cráneo fosilizado de un niño joven que vivió hace cerca de 2,8 millones de años en Taung, en el sur de África.Fue hallado en 1924 y analizado por el anatomista Raymond Dart. Dart se dio cuenta de que pertenecía a otra especie que llamó Australopithecus africanus.Supe con una mirada que lo que tenía entre mis manos no era un cerebro antropoide común y corriente (...). Era la réplica de un cerebro tres veces más grande que el de un babuino y considerablemente más grande que el de un chimpancé adultoRaymond Dart, anatomista"Supe con una mirada que lo que tenía entre mis manos no era un cerebro antropoide común y corriente (...). Era la réplica de un cerebro tres veces más grande que el de un babuino y considerablemente más grande que el de un chimpancé adulto", dice.Sus dientes eran más parecidos a los de un ser humano que a los de un simio. Dart concluyó también que podía caminar erguido, como un humano, porque parte de su cráneo -donde se junta la espina dorsal con el cerebro- tenía forma humana.El niño de Taung fue el primer fósil que nos dio una pista de que los humanos se habían originado en África.Pero cuando Dart publicó su análisis, fue muy criticado. En ese momento, se pensaba que Europa y Asia habían sido cruciales para la evolución humana.
Mandíbula robusta y brazos largos
Cuando apareció Lucy, los antropólogos aceptaron que los Australopitecinos eran seres humanos tempranos, no solo simios.¿Cómo era Lucy? Ésta fue una de las primeras preguntas que surgió.Caminar, un rasgo exclusivamente humano
Cambio en la dieta
Se desconoce por qué Lucy dejó la seguridad de los árboles para desplazarse por el suelo.Una teoría es que pudo haberlo hecho para buscar comida, dice Chris Stringer, del Museo de Historia Natural de Londres.En la misma línea, evidencia reciente indica que se produjo un cambio en la dieta de los Australopitecinos.La dieta de varias especies -según evidencia hallada en restos preservados en dientes de homínidos-, incluida la de Lucy, comenzó a expandirse hace 3,5 millones de años.En sociedad
Según fósiles hallados en Hadar, Lucy parece haber vivido dentro de un grupo social pequeño.Ella era pequeña en comparación con los hombres de su especie. Esto ha llevado a pensar que su sociedad estaba dominada por hombres.Pudo haber sido una sociedad polígama, como los grupos de gorilas hoy día.Por lo general, los machos son considerablemente más grandes en especies donde un macho controla a varias hembras.Punto intermedio
También parece que la infancia de Lucy fue más corta que la nuestra y que tuvo que valerse por sí misma desde pequeña.Sabemos que era adulta porque tenía muelas de juicio y sus huesos estaban fusionados.Confío en que encontraremos fósiles de ese intervalo, porque sé que en Etiopía hay ya cuatro áreas de estudio con sedimentos con fósiles de esa épocaTim White, investigador de la Universidad de CaliforniaPero, a diferencia de los humanos modernos, parece haber crecido hasta alcanzar su tamaño muy rápido. Murió a los 12 años, y su cerebro alcanzó su tamaño final más rápido que el nuestro.En síntesis, Lucy era algo a mitad de camino entre los simios y los humanos.¿Dónde se ubica entonces en nuestro árbol genealógico?Al parecer, Lucy no nos remonta a nuestros ancestros comunes con el chimpancé como se pensaba.Los últimos estudios genéticos indican que nos separamos de los chimpancés mucho antes, quizá incluso hace 13 millones de años.De ser así, Lucy llegó bastante tarde en la historia de la evolución humana.