Entonces, se convierte en una máquina de matar, adquiere una memoria prodigiosa y la velocidad del rayo. ---
El ritmo es vertiginoso, aunque resulte irregular en el sentido de que, en su segunda mitad, los aspectos ¿pseudo? filosóficos-científicos, priman sobre la acción pura y dura.
Pero de todo hay, jamás se le pierde la cara y al final te pasas un buen rato. Eso no quiere decir que convenza plenamente, pues deja muchas preguntas en el aire, algo totalmente normal dado lo que se nos cuenta y sugiere.
Pero creo que es un trabajo a tener en cuenta, que posiblemente gane con el paso del tiempo, y que, aunque no sea una obra maestra, sí que al menos muestra al espectador de forma atractiva una historia llena de posibilidades. Ahora que sean otro/as guionistas y directore/as quienes aporten otras cosas e ideas al respecto.