#Músicaparaelencierro. Otro aporte de LightbulbSun y otro disco del Flaco Spinetta que revive en el blog cabezón. Un gran trabajo que llama la atención porque quedó relegado en la discografía del Flaco, pero aquí le damos el lugar que se merece, junto y al nivel de otras joyas musicales y poéticas que ha registrado la carrera artísita de Luis Alberto Spinetta. Con ustedes, uno de los grandes discos (casi dejados de lado) del universo spinetteano, que vuelve a vivir en el blog cabezón.
Año: 2003
Género: Rock
Duración: 54:42
Nacionalidad: Argentina
Ésta es una canciónOtro gran aporte que en algún momento nos brindó el Mago Alberto, y da cuenta que con los aportes de nuestros colaboradores que no paran, es lo que hace grande a este blog! Otro aporte de LightbulbSun. Un gran disco del flaco, que pasa desapercibido sin que muchos lo tengan en cuenta.
para los árboles
que extrañan la caricia
del aire sobre sus hojas.
Para los Árboles es un disco de Luis Alberto Spinetta solista, grabado en el año 2003. Con teclados y pasajes instrumentales que le dan al álbum, un toque electrónico. Lo que Spinetta quiere en este disco, es homenajear a las bellezas de la naturaleza más allá de la mirada humana. El disco está dedicado a la memoria de María Gabriela Epumer. Fue presentado ese mismo año en los estudios de MuchMusic Argentina, donde Luis Alberto junto a su banda presentaron este material en vivo.Wikipedia
Paradógicamente, este disco es inconseguible, aunque haya mucha gente que seguramente lo compraría si lo consiguiera... con grandes temas como "Cisne",
"Halo lunar", "Dos murciélagos", "Ciénaga dorada", "Néctar" o "El lenguaje del cielo" (quizás una de las mas hermosas canciones del Flaco), entre otros. Esto sale del famoso arcón de los recuerdos de Alberto, lugar maravilloso donde se encuentran joyas perdidas en el tiempo y las rexcatamos para todos, creo que el disco se puede encontrar en Internet pero en esta versión Alberto nos escaneó el librito con las letras completo, este disco tiene como particularidad que cuando se lanzó sólo lo podía encontrar a la venta en los kioscos de revistas. Aquí aterriza en el blog cabezón para que todos lo puedan disfrutar.
Y que placer,Poesía musical en estado puro... vamos con un comentario de tercero para ponerle un poquito de contexto, aunque no creo que haga falta en este caso:
cuando no hay nada,
que pueda ver,
y solo invento tu sonrisa,
y apago así,
toda agonía...
Después de la tibieza –musical- de Los Ojos (1999) y Silver Sorgo (2001), álbumes tímidos, introspectivos aún para el mismo Spinetta, lanza el mas combativo Para los árboles, un disco de difícil escucha como casi todo lo de Luis pero que superadas las primeras audiciones se torna irresistible.
Como si las canciones tuvieran que sedimentarse lentamente en nuestro oído y paladar, como los buenos tintos.
Mucha de la culpa de esta "exigencia" con su música la tiene el propio Spinetta, que con su disco Los socios del desierto (1997) llevó a un techo muy alto su propia producción -y la de los demás- con 33 temas de ensueño. El disco comienza y crece lento pero constante hasta su final, encontrando al mismo músico maduro de siempre con su música atemporal.
Cisne ya nos muestra el lirismo acostumbrado, Halo Lunar remite a sus coqueteos con el jazz, toques de dureza en Yo miro tu amor, modernidad en A su amor, allí y exquisitos arreglos -y si me apuran el mejor tema- en El lenguaje del cielo, con esa intro tan característica y unos coros femeninos demoledores, sutilidad, buen gusto y belleza en la forma.
Pero por toda la belleza spinettiana, no se le puede perdonar un tema como Agua de la miseria, intento fallido de tema comercial, tanto, como su barroco video.
Se torna molesto porque toda la discografía de Spinetta se basó en una lucha anti-hit de la cual estamos siempre eternamente agradecidos. Seguir viviendo sin tu amor es la excepción que confirma la regla.
Para recomponernos, el final de este álbum es un exquisito tándem formado por Néctar, El lenguaje del cielo y Tu cuerpo mediodía, tres temas como para terminar bien alto en cuanto a calidad. La tapa también es bellísima, con la misma carga de poesía que la propia música.
Manos/árboles, dedos/ramas que en la contraatapa conducen hacia las canciones/hojas.
Un homenaje con música de Luis hacia la Naturaleza.
Un homenaje de Luis a nosotros mismos.
Y escribir mucho más en este tipo de discos es al pedo, los dejo con el Flaco y me pongo a preparar otro posteo que no doy abasto con todo lo que tengo para traerles. Una vez más, agradezco (y agradezcan) a LightbulbSun por compartir estas bellezas. Y me voy con palabras del Flaco referidas a este disco:
No se lo dedico a los árboles, pero si se lo dedicáramos a los árboles tampoco está mal y también es metafórico.
Está dedicado a una especie de fuego interior, castanedeano (por el escritor Carlos Castaneda), pero porque siempre exigió un fuego interior en forma de árbol, como un rizoma.
Si analizamos nuestro sistema circulatorio en una transparencia de nuestro cuerpo, es como un árbol, bueno, algo de eso hay.
Pero todo tratado desde simples canciones que podrían desaparecer en segundos, como granos de arena.
Castaneda dice que en la tradición de los Toltecas, los árboles son aquellos brujos, que eligieron el camino más corto y fácil para lograr la trascendencia y como si fuera un castigo, quedaron transformados en árboles. A mí me gusta pensar que los árboles son guerreros que equivocaron el camino