IU en la Comunidad de Madrid, después de semanas en las que ha sido acosada para su autodisolución en una especie de amalgama denominada eufemísticamente “partido instrumental” por parte de sectores externos y lo más triste internos, ha dado por concluída esta etapa de la que sale si cabe aún más reforzada a nivel interno, y con las miradas puestas, a corto plazo, en las próximas elecciones autonómicas y locales, y de cara al futuro a la reconstrucción de una organización política que funcione como tal.
Hubo quien se autoproclamó y autonombró “la reina del cotarro”, olvidándose de lo que había firmado días antes y había afirmado en Majadahonda: “si gano las elecciones primarias, me pondré al servicio de la organización para al día siguiente ponernos a trabajar”, y hay quien como electo en primarias decide como buen saltimbanqui dar saltos en el vacío para también autoproclamarse, dirección, candidato, negociador y quién sabe cuantas cosas más.
Lo que sí es cierto es que IUCM, tiene candidato y tienes candidaturas en las localidades de la Comunidad de Madrid y lo más importante tiene un programa desde el que construir la unidad de la izquierda, y no desde supuestas unidades populares, del divide y vencerás.
No hay unidades populares, ni frentes en Madrid, sin IUCM, y mucho menos contra IUCM, de eso debería darse cuenta el candidato a la Moncloa y colaborar con la dirección de IUCM en vez de dedicarse a patrocinar actos públicos en Madrid Ciudad, y otras localidades sin contar con IUCM.