Luna nueva de agosto

Por Mbbp
ago
27
2014 Escritor // Miguel Benavent de B.

LUNA NUEVA DE AGOSTO

Escrito por Miguel Benavent de B.   Sin comentarios

Alguien le había contado que la luna nueva era la oscuridad total, tal como era el inicio del Universo. Todo estaba por crearse, aún. Todo era solo posible…

El gato, como cada noche, se encaramó a su tejado preferido, de viejas tejas y que años antes había estado lleno de preciosas flores amarillas que su Princesa, ahora silenciosa, con amor había dejado. Y esa noche, como cada noche, él subiría a observar la luna que, aunque no fuera visible, estaba oculta pero irradiaba su misma energía…

Él sabía que en la luna estaba siempre oculto todo lo que deseaba. Todo aquello que había soñado desde siempre. Pero además esa noche de luna nueva era especial. Quizás un nuevo comienzo, tal vez la primera vez en su vida que no cerraría sus felinos ojos para poder ver a la vez con el corazón…

Y vio que con sus ojos bien abiertos era capaz de ver la vida y a la vez el amor, con el corazón. Y por fin entendió que no se puede amar todo lo que sueñas con los ojos cerrados a la realidad. Que amor y realidad se necesitan mutuamente y deben compartir momentos para convertirse en vida. Esa vida plena que ya no necesita optar por los ojos o el corazón, para ser verdad. Porque sin realidad, el amor solo soñado no podría existir, como la luna y el sol que, aunque no se encuentren, se necesitan mutuamente…

Y con los ojos y el corazón bien abiertos alzó su vista al cielo oscuro de esa especial noche de luna nueva y entendió que nunca más debía escoger. Que la clave de la vida es precisamente la armonía de los opuestos, ese sutil equilibrio entre sueños y realidad, corazón y razón, luna llena y luna nueva, pero siempre fluyendo con la vida cambiante en un ciclo sin final…

Y sonrió feliz, sintiendo que era capaz de ver la vida en su totalidad, con sus sueños más elevados y su concreta realidad, en la que habitan por igual hadas mágicas, princesas silenciosas y sus amadas niñas, en ese bosque encantado con un lago plateado, allá donde nace el arcoiris en el lejano Mar del Norte, donde coexisten ficción y realidad. Y que lo que une realidad y ficción no es más que el corazón bien abierto dejando fluir el amor, que convierte en mágica cualquier persona, momento o lugar! Tal vez por fin había aprendido a confiar en la vida…

Etiquetas: amor, hada mágica, luna nueva, princesa silenciosa, realidad, sueños