"El Anticristo, muy señores míos, querido público, será de la estirpe de Dan. Reinmar de Bielau, llamado Reynevan, se encuentra en una encrucijada. Por un lado, el médico y alquimista educado en Praga se ha convertido en un participante de importancia en la revolución husita contra el clero y la nobleza, un movimiento que ha impuesto su ley en Bohemia y Moravia y que amenaza con extenderse por toda Silesia, Sajonia y Polonia, hasta el mar Báltico. Por otro, la Inquisición ha capturado a su amada, Jutta de Apolda, y la utiliza como baza para chantajearle y obligarle a espiar para los enemigos husitas. Excomulgado, manipulado por unos y otros, y rodeado de una creciente desconfianza entre los suyos, sólo contará con la ayuda de sus fieles amigos Scharley y Sansón Mieles para sortear las intrigas y peligros, inmerso en un espeluznante juego de poder que enfrenta a nobles y campesinos, eslavos y alemanes, paganos y cristianos, partidarios del progreso y defensores de la tradición. En los campos teñidos de sangre del corazón de Europa, Reynevan perderá los últimos restos de su inocencia y aprenderá que ni las intenciones más puras ni la voluntad más firme pueden nada contra las inexorables realidades de la marcha de la historia... ¿o quizá sí?"
La espera ha sido larga, cuatro años para ser exactos, pero ha valido la pena. El gran Andrzej Sapkowski ha puesto punto y final a su trilogía ambientada en el siglo XV, más concretamente en las entrañas de las Guerras Husitas, lo que el escrito polaco bautizó como "Una cruzada en el corazón de Europa".
A estas alturas el nombre de Sapkowski ya resulta familiar, de hecho es un escritor reputado y muy considerado en el mundo de la fantasía gracias a la extraordinaria saga de libros de Geralt de Rivia. El brujo cazador de monstruos, un auténtico icono (incluso Netflix planea dedicarle una serie), sirvió de excelente carta de presentación para el polaco, logrando elevarlo a la altura de otros grandes tótems de la fantasía épica como George RR Martin, Joe Abercrombie o Brandon Sanderson. Curiosamente la fama le llegó tarde a nivel internacional, porque en Polonia sus obras ya gozaban de gran éxito en los años 90, pero... nunca es tarde si la dicha es buena, ¿no?
Bueno, pues yo conocí a Sapkowski gracias a Geralt y al ver que Alamut también publicaba una obra suya que mezclaba la narrativa histórica con la fantasía, acepté el reto. El estilo del polaco me había atrapado por completo, soy un auténtico admirador de su ritmo, de su ingenio y de las pinceladas de humor que salpican sus páginas... a mí me parece un estilo impecable (mención especial para el trabajo de traducción de Fernando Otero Macías), rico en la variedad de su vocabulario, en la elección del tempo y siempre capaz de transportarte a la época o mundo en cuestión. Leer a Sapkowski es toda una experiencia, por eso, sin tener mucha idea de las Guerras Husitas ni de la realidad centroeuropea de la primera mitad del siglo XV, no dudé en comprar "Narrenturm" (2009), posteriormente "Los Guerreros de Dios" (2012) y, finalmente, "Lux Perpetua" (2016), los tres capítulos de esta trilogía.
Tampoco quiero insinuar que Andrzej Sapkowski no se haya documentado al escribir su trilogía y en "Lux Perpetua" sigue demostrando en extenso conocimiento de lo acontecido, pero utiliza más ese conocimiento para presentarnos los nombres de los cabecillas o nobles de ambos bandos, para que recorramos junto con los protagonistas del libro diferentes localidades, para que podamos estar en algunas batallas y para fechar los hechos, situándonos así en el espacio y en el tiempo. Cierto, tal vez hubiese sido una gran idea añadir un mapa en cada uno de los libros que componen la trilogía porque viajar, desde luego, viajan y, salvo que uno sea experto en geografía del corazón de Europa, cuesta un poco ubicarse. Silesia, Moravia, Bohemia, Polonia, Sajonia, Lituania... muchas cosas suceden en unos años convulsos y, en ocasiones, cuesta moverse geográficamente si no se está familiarizado con esas tierras.
Otro de los posibles peros de "Lux Perpetua", como ya cité en las reseñas de los dos libros anteriores, es la abundancia de citas en latín y del uso esporádico de palabras, normalmente relacionadas con el ámbito militar, en otros idiomas. Si uno es muy obseso con estas cosas y necesita andar buscando la traducción y el significado, puede acabar perdiendo los nervios, pero tampoco Sapkowski utiliza el latín, el polaco, el checo o el alemán para momentos clave o hechos esenciales, así que no desvirtúan la trama ni suponen mayor problema para el devenir de la historia de Reynevan.
Andrzej Sapkowski domina la creación de personajes porque les otorga profundidad, carácter, discernimiento, visión panorámica y ética. Luego podremos estar de acuerdo o no en lo que hacen o en cómo lo hacen, pero siempre podremos comprender qué les impulsa a tomar decisiones o cometer sus actos. Eso es algo que me gusta del escritor polaco, que no emite juicio alguno, que no se posiciona, deja eso en manos del lector. Es decir, no hay un halago a la causa husita y un ataque contra la causa católica, ni al revés, Sapkowski sólo expone los sucesos, los narra a través de los ojos de los protagonistas y los plasma en los diálogos, pero sin tomar partido. Y, al dividir la historia en tres libros, el autor logra que el Reynevan que conocimos en "Narrenturm" difiera del que encontraremos en "Lux Perpetua" y lo mismo sucederá con otros personajes, quizá tomando mayor relevancia la figura del inquietante Grellenort, alias Treparriscos, al que vamos a ver más de cerca. Y es lógico que así sea porque la trilogía abarca un período de gran agitación, unos años intensos en los que los protagonistas viven y sobreviven a muchas situaciones límite en las que son puestos a prueba física y mentalmente y todo eso hace que algunos se replanteen qué están haciendo, su visión del entorno y que la línea que separa la causa de la vida sea cada vez más borrosa.
Es un gran libro, es una gran trilogía y es un gran escritor. "Lux Perpetua" es un memorable colofón a esa llamada cruzada en el corazón de Europa y es una nueva demostración del talento literario de Andrzej Sapkowski.
VALORACIÓN: 8/10
- Puedes leer aquí la reseña de "Narrenturm".- Puedes leer aquí la reseña de "Los Guerreros de Dios".