"Machete (Danny Trejo) es un ex-agente federal que desaparece y es dado por muerto después de un enfrentamiento con Cortez (Steven Seagal), un narcotraficante mexicano. Traicionado y exiliado en Texas, se verá envuelto en una conspiración que acaba con el asesinato frustrado del senador McLaughlin (Robert De Niro) y Machete escapando tras ser etiquetado como el principal sospechoso del atentado. A partir de entonces, Machete iniciará una sangrienta venganza para limpiar su nombre acompañado de todo un rosario de personajes realmente emblemáticos y a cual más increible".
Machete no manda mensajes, Machete improvisa
Machete es una película realmente difícil de calificar debido a la gran cantidad de matices que contiene y el amplio espectro de géneros que toca. Pero lo que sí tengo claro es que es una película cachonda, divertida y entretenida, una auténtica gamberrada. Y eso, con el panorama actual del mundo del cine, ya es algo y debería ser una constante más que una anécdota. Que no se nos olvide que el cine es, en gran medida, entretenimiento, y nunca están de más esas películas que no se toman en serio a sí mismas y que ofrecen diversión pura y dura a un espectador que durante hora y media no pretende otra cosa más que entregarse a los brazos de espectáculo.Pero antes de nada, echemos durante un instante la vista atrás para encontrar los orígenes de Machete. En el año 2007 Robert Rodriguez y Quentin Tarantino concebían un proyecto conjunto titulado Grindhouse, que se componía de dos películas: Planet Terror (Rodríguez) y Death Proof (Tarantino). Estrenadas en los EE.UU. al estilo de esas dobles sesiones grindhouse, como transición entre las dos películas se proyectaron cuatro trailers falsos: Thanksgiving, Don´t y Werewolf Women of the S.S., dirigidos respectivamente por Eli Roth, Edgar Wright y Rob Zombie. Completaba el póker de trailers Machete, dirigido por Robert Rodriguez:
Robert Rodriguez no tuvo más remedio que ponerse manos a la obra y darle a los fans lo que éstos le rogaban encarecidamente: que Machete se convirtiera en un largometraje para poder asi disfrutar de las andanzas del héroe mexicano en una película de hora y media. Y dicho y hecho: Rodriguez se puso manos a la obra y tres años después ha visto la luz el proyecto. Machete es una particular creación cien por cien imbuida del "estilo Robert Rodriguez", una muestra más de ese cine gamberro y fronterizo que recupera el aspecto y la esencia de los exploit films y la serie B de antaño y también, por qué no decirlo, deudor del cine de acción de los `80.
Y un aspecto que hay que mencionar por encima de todo es que es una película que nunca se toma en serio a sí misma y en la que se suceden situaciones bizarras, exageradísimas, absurdas e inverosímiles sin ton ni son. Ése es el juego que ha planteado el director: nos puede gustar o no, pero es lo que el público demandó en su día y es lo que el texano les ha ofrecido. Además, Robert Rodriguez se cubre las espaldas, y para que Machete no se convierta en un enorme sinsentido incluye en el film una subtrama relacionada con la inmigración ilegal y todo lo que ello conlleva que le permite plantear toda una sarta de gags, alusiones al tema y lo que es más importante, una batería de críticas directas a un lado y otro de la frontera. ¡Que no se diga que Machete no tiene pies ni cabeza!
Danny Trejo, Robert De Niro y Michelle Rodriguez
La mayor parte del peso (a modo de icono, que no intérprete, pues tiene menos líneas de diálogo que Schwarzenegger en Terminator...) de la película recae sobre Danny Trejo, todo un personaje que arrastra tras de sí una historia digna de ser contada. Ex-presidiario y ex-drogadicto, Trejo consigue a sus 66 años un papel protagonista, ¡y qué papel! Machete se pasea por la pantalla cercenando cabezas y amputando miembros en una orgía de sangre y vísceras que volverá locos a los aficionados a la casquería. Trejo es feo como un demonio, pero tiene cierto carisma y no tiene problemas a la hora de erigirse como héroe del populacho. Pero para que la historia alcance el punto de ebullición necesario para que la venganza explote no pueden faltar una retahíla de villanos con sus respectivos esbirros...Don Johnson, Steven Seagal y Jessica Alba
Así, tenemos a un enorme Steven Seagal (en cuanto a tamaño, quiero decir...) en el papel del narco Torrez, origen del cruel destino de Machete. Jeff Fahey da vida a Michael Booth, un ambicioso personaje sin escrúpulos capaz de cualquier cosa con tal de alcanzar el poder (Fahey quizás sea el mejor parado de todo el reparto). Don Johnson, bastante mayorcete ya, interpreta a Von Jackson, un personaje siniestro que pretende ejecutar la ley a su manera en lo que al tema de la inmigración se refiere, y para ello qué mejor que contar con un aliado en el bando de la política: el senador McLaughlin, un tipo hilarante pero con el objetivo claro de expulsar a los inmigrantes (a los que llama cucarachas e insectos sin cortarse ni un pelo...) a toda costa. El personaje corre a cuenta de Robert De Niro, que rozando la autoparodia sale victorioso del reto de interpretar un rol que roza el ridículo y lo descabellado en pantalla (ojo a los spots de TV para su campaña política).Además, todo héroe que se precie necesita cierta presencia femenina a su alrededor. En Machete, las femme fatale están a la orden del día. Jessica Alba da vida a una agente de inmigración de curioso nombre (Sartana Rivera) que enarbolará la bandera de la justicia en un idílico papel. Michelle Rodriguez es Luz, vendedora de tacos de día y justiciera revolucionaria cuando la ocasión lo requiere que no dudará en echar una mano a Machete. Y qué decir de Lindsay Lohan como April, un papel autoparódico que parece haber sido escrito en base a su propia trayectoria vital: chica joven, descarriada, capaz de lo malo y de lo peor.
Poster estilo retro-viejuno
"They just fucked with the wrong mexican"