Cornelia Keneres es una mujer de avanzada edad y elevada posición social que hace mucho que no sabe nada de su único hijo, Barbu. Un día le llega la noticia de que Barbu, conduciendo a más velocidad de la permitida, había atropellado y matado a un niño. La mujer se pondrá, de inmediato, a hacer todo lo que esté en su mano para tratar de salvarle de la cárcel sin importarle, en su desesperación, cualquier falta de respeto ante la ley o las autoridades. La falta de su hijo merece un castigo, pues resulta innegable que el error es enteramente suyo, no obstante eso no parece importarle, tan solo que salga impune de esta situación.
La tormentosa relación existente entre madre e hijo es el núcleo central de este drama, una relación imposible en la que la sobreprotectora madre lucha por salvar a su hijo incluso cuando este deja muy claro que no quiere su ayuda. El amor de Cornelia la lleva a amañar pruebas, sobornar para cambiar los testimonios y mentir siempre que sea necesario, pues la culpabilidad de Barbu es incuestionable y es necesario hacer uso de todo tipo de ilegalidades para salvarle de su consabido castigo. Puede resultar comprensible el cariño que le impulsa a ayudarle, pero resulta tan arrogante en sus métodos frente a la familia pobre que ha perdido a su hijo que empatizar con los personajes resulta casi imposible, incluso en el diálogo final de la cinta. La propuesta es arriesgada al plantearse desde esta perspectiva, pero no fructifica en ningún momento, ya que los personajes resultan tan detestables que lo único que espera el espectador es que reciban su justo merecido. El director Calin Peter Netzer desarrolla con corrección la cinta, pero en absoluto logra acercarse a los grandes resultados que otros compatriotas han conseguido, como los anteriormente nombrados Cristi Puiu y Cristian Mungiu.
Cameo edita con buena calidad y ningún extra el último y reconocido film que nos trae Rumanía, exclusivamente en DVD y a un buen precio.