Madre Impunidad

Publicado el 12 mayo 2015 por Purasvitae @PurasVitae
Señora oscura, la que teniendo un rostro desfigurado aún sonríe a pesar de las peores circunstancias. Copa rota, enfrente jóvenes armados pegando tiros al aire, balas perdidas y varios muertos, Bello Monte nunca había sido tan recordada por su morgue que por su concha acústica. Un malentendido, un arma y otro que se va a la morgue, el que disparó está tranquilo porque la chapa le protege.

(Fuente: http://www.analisislibre.org/)

Señora siniestra, verborragia eterna, me quito el nombre si a la vuelta de un año hay niños en la calle o que pasen 100 días y si sigue la crisis eléctrica renuncio. Gritos, carajos, show. Mucho dinero para los pobres, los pobres jóvenes que encontraron la oportunidad de hacerse millonarios en pocos meses. Los otros, los verdaderos pobres, siguen esperando la próxima cadena, siguen esperando el anuncio, siguen esperando la chaqueta del populismo para vestirse de vendedores, de negociadores, de algo. Me dieron una casa, te la dejo en 100. Me acaban de dar un Corolla te lo vendo a tanto.

(Fuente: http://www.abc.com.py/)

Señora malvada, siempre presente cuando el que sufrió la injusticia pide solo justicia a cambio. Si el culpable es del régimen, no hay forma. Si usted se pronunció en contra la dictadura, y ésta le teme, va preso aunque no encuentren manera de inculparlo, que al menos intentarán volverle loco para que decida matarse. Su bastón es la muerte, con el que ella camina por donde va sin importar lo que pase. Ella anda y le importa poco lo que suceda, usted está en la rueda de la fortuna y si la pelotita cae, venga adiós.

(Fuente: http://www.elimpulso.com/)

Señora del dolor, la que se alimenta del sufrimiento del que la pasa mal porque entre la vida y la muerte un medicamento puede tardar el tiempo que te queda de vida. Disfruta, aquella señora, porque la dictadura aún logra decirle a algunos que eso es culpa de las farmacéuticas y no de la dictadura que se apropió de los dólares con los que el país negocia su día a día. La risa de la señora llega al ahogo cuando escucha a una mujer decir que la “guerra económica” o la verdad sea dicha la escasez generada por el régimen, es culpa de Polar porque si ellos sacan cervezas como es que no sacan alimentos… La señora casi se ahoga de la risa recordando que en casi todos los rubros alimenticios, la dictadura maneja la mitad o más de las empresas que deben producir.

(Fuente: http://elmundo.es/)

Señora trágica. En Venezuela la palabra mantenimiento apenas se vio en la democracia, pero desde que estamos en dictadura aquella palabra desapareció. Peor. En general las obras hechas por el régimen no responden a los mínimos requeridos para evitar daños que perjudiquen a quienes puedan estar involucrados con aquella obra. Y así la señora ha visto como se pueden caer edificios, esperanzas, viviendas, sueños, lo mismo cuando una vía de pocos meses se llena de huecos como la CANTV se llena de quejas por la velocidad de internet o por la calidad de las llamadas. Es irónico, dos satélites pero la vialidad parece previa a la dictadura de Pérez Jiménez, dos satélites y la gran misión vivienda es un show por la cabilla y el cemento que resuena cuando los edificios empiezan a ceder.

(Fuente: http://elvenezolanonews.com/)

Señora infernal. Un tráfico, varias motos y entre ellas la que va sembrando malos ratos y aumentando miedos. Sea cual sea lo robado ir a una comisaria es lo más cercano a un chiste en vivo. La policía científica que entra en emergencia porque ha sido atacada por la inseguridad. La inseguridad gobierna que hasta los guardaespaldas de los chivos del régimen son objetivos. La dictadura va tras un blindaje, seguridad privada y los demás a ligarla.

(Fuente: http://images.prensa.com/)

Señora sangrienta. Más de 200.000 muertos después, ella sigue imponiendo el ritmo. Fin a fin los muertos sumarán. Las morgues trabajan más que los mercados, la morgue trabaja más que el hospital, la universidad, una vez más, la concha acústica

(Fuente: http://www.taringa.net/)

La madre impunidad es la madre de la revolución, de la dictadura que aun consigue disfrazarse de democracia en la espera de unas elecciones a las que iremos todos a votar pero que seguramente no nos sorprenderemos porque nos volvieron a joder. La madre impunidad fue la dama ebria e irónica que se hizo pareja del dictador anterior y que se volvió la madre del actual. Es aquella voz que autoriza todo asesinato, todo robo, todo acto de corrupción. Que una señora vaya a Brasil a llevarle un arma a un funcionario va lo mismo que se roben todos los reales para importar los alimentos que ahora no encontramos.

(Fuente: http://elvenezolanonews.com/)

La madre impunidad es la que espera en un cementerio, en un aeropuerto, en el final de una historia que triste debe cambiar su curso.

(Fuente: http://cumbresdecurumo.comunicas.org/)

Si los venezolanos queremos que esta señora desaparezca, más allá de ir a votar, más allá de manifestarnos en contra de la dictadura, necesitamos ubicar los valores, el respeto, la esperanza de que todos, absolutamente todos, podremos ser mejores.