Por un lado, si se ha demostrado por parte de la Fiscalía de esta grave irregularidad…¿Por qué no se piden responsabilidades penales? Los encargados de la seguridad de nuestro medio ambiente, tienen la responsabilidad de cuidar la salud de las personas y cometer actos como los descritos, deberían ser perseguidos por oficio y llevados a los tribunales. En sucesivos días y mientras por el aumento de la polución surgía en el centro de
Ana Botella se le ocurre culpar de esta contaminación a los coches con motor diesel y como responsable de medio ambiente dijo que Madrid no es la única ciuda
Un estudio realizado por tres Hospitales y el Instituto de Salud Carlos III, relaciona los niveles altos de contaminación por partículas suspensión, con la mortalidad por enfermedades del sistema circulatorio.
La Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR), advierte del aumento del número hospitalarios por patologías respiratorias, la aparición de alergías, enfermedades respiratorias tempranas en niños, pérdida de función pulmonar en mayores e incluso cáncer de pulmón, debido al alto índice contaminante del aire en las ciudades.
La Comisión Europea informaque la contaminación atmosférica sobre todo en las grandes ciudades, provoca unas 370.000 muertes prematuras anuales en la Unión Europea, de las que 16.000 víctimas son en España. ¿Podemos quedarnos tranquilos ante estas dramáticas cifras? Nos preocupamos y con acierto de las víctimas anuales por conducir….¿y por vivir en una ciudad? ¿o es que estas muertes no cuentan y son efectos colaterales de la civilización? ¿y si nos toca a nosotros a algún familiar? ¿Quién tiene la responsabilidad de que esto no ocurra?. Ellos, los políticos que viajan en sus coches escoltados y de grandes dosis de contaminación, ciudadanos que deberían dar ejemplo y poner solución a todos estos temas de salud, pasan indiferentes por sus cargos sin importarles para nada la salud de la sociedad a la que sirven. Toman decisiones sin importarles las responsabilidades y las consecuencias, a sabiendas que en caso de estar equivocados, quien siempre lo pagará será el ciudadano con sus impuestos. Las decisiones de sus malas políticas jamás son cuestionadas y si se hace, cosa dudosa, sólo dejan el cargo para coger otro, sin responsabilidad penal.
Ya hemos visto, que no sólo los ecologistas dicen verdades, sino que estudios médicos firmados por grandes especialistas, certifican que en las ciudades se está asesinando a la gente, sin que nadie solucione este urbanocidio planificado, sabiendo además que existen energías alternativas libres y nada contaminantes que pueden cambiar la
Pero aún comprobándose por parte de la Fiscalía de Medio Ambiente que el Ayuntamiento de Madrid quitó estaciones de mediciones situadas en lugares estratégicos de la ciudad y que han superado niveles permitidos, los políticos de turno cierran los ojos y los oídosy se hacen los tontos ante tanta maldad elaborada. Y los ciudadanos se callan, no luchan por sus derechos a la vida, se encierran en su timidez y dejan que los políticos se adueñen de nuestras vidas. ¿Por qué no presentamos denuncias ante el Juzgado por ineptitud y supuesto delito contra la Salud Pública? Estamos en nuestro derecho y casi diría yo, en nuestra obligación de hacerlo.
Hace cinco años el Alcalde de Madrid presentó su “Plan de Calidad del Aire”. Un fracaso, un coste del dinero público tirado a la basura y un fracaso medioambiental que debería tener responsabilidades políticas y penales.
La Sociedad Española de Epidemiología dio un comunicado de prensa relacionado a la contaminación atmosférica que afecta a numerosas ciudades españolas, instando a todas las administraciones, a implantar y potenciar medidas destinadas a mejorar la calidad del aire que respiramos, en especial en las grandes ciudades, ya que existen claras evidencias científicas que demuestran el efecto nocivo de la contaminación atmosférica en la salud de las personas.
Son profesionales de la salud que lanzan esta advertencia. Son 16.000 muertos anuales en España lo que clama al cielo y desautoriza la gestión de los políticos. No podemos permitir que no cumplan con su deber de proteger al ciudadano a favor de l
El responsable de salud, debe ser precisamente lo que significa, responsable de nuestra salud y si fracasa tiene que responder ante los tribunales, lo mismo que un ciudadano debe responder ante un delito contra la salud pública. Engañar al ciudadano cerrando o trasladando estaciones de medición de partículas a lugares más despejados, es un delito contra nuestra saludyuna falta de responsabilidad que debe ser castigada. No pueden con palabras vanas eludir la responsabilidad, mientras que en la ciudad los ataúdes y el luto, silencian a los payasos de discursos dorados y las lágrimas recorren las aceras de nuestra ciudad, poniendo al descubierto las mascarillas inertes de unos políticos, que han confundido el servicio a la sociedad, con el beneficio a un partido a quien deben obediencia ciega cómo si de una secta se tratara.
PEDRO POZAS TERRADOS (NEMO)