Amaranta Rojas
Albert Einstein nos dejó una corta pero sabía frase, que pudo ser una manera muy sencilla de explicar parte del trabajo que desarrolló en vida. Dijo en una oportunidad: el tiempo es la forma como la naturaleza evita que todo ocurra al mismo tiempo.
En esa frase pensaba al ir oyendo una muy buena conferencia que ofreció recientemente David Paravisini en el salón de sesiones del Consejo Legislativo del Estado Anzoátegui, que tuvo ideas y propuestas para compartir y rebatir.
En un tiempo, ya de eso hace unos siete o más años; Chávez ordenó prácticamente el desarrollo de un proyecto para asumir el gas como combustible para servir al parque automotor venezolano. Se ajustaron algunas estaciones de servicios, pero el proyecto creo llegó hasta esa fase (la más fácil) y luego fue abandonado totalmente. Es muy raro ver autos particulares y de servicio en los canales donde se ofrece gas vehicular.
Digamos que los hijos de Chávez dentro de PDVSA y de los ministerios que tenían que ponerse en un proyecto de ese tipo, que su fuerte era intervenir en un cambio en el ensamblaje de carros, no le hicieron caso a Chávez y hoy estamos en otro tiempo con un barril de petróleo por debajo de 50 dólares y con un barril de gasolina por sobre los 170 dólares. Fue más fácil siempre pensar y sostenerse en sacar y exportar hidrocarburos. La nueva PDVSA continúa con ese lema. Esta discusión se coloca debajo de la alfombra.
En otro tiempo, que tiene más o menos esa cantidad de años (7-10 años), nos plantearon y probablemente fue idea de Chávez; el asunto de la “siembra petrolera”. No sé qué cosas implicaba esa siembra, pero PDVSA luce hoy (cuesta decirlo) como la caja chica que permitió hacer un buen gesto, pero sin fortalecerse. O sea, viendo algunos datos de esta conferencia, con la siembra petrolera y esto suena irónico, PDVSA no agarró musculo, aunque por sus activos, la empresa luce como una de la más importante del mundo.
Esta Conferencia del Profesor David Paravisini[i] tuvo muchos aspectos que obligan a varios análisis. En un grupo amplio donde participo y que funciona como círculo de estudio, se discutieron los aspectos de esta conferencia y decidí tomar punto para transformarlo en un artículo, que creo relevante y que permite precisar, que siendo el aumento de la gasolina una decisión justa, implica ver esta posibilidad en el marco de la nueva PDVSA. Aunque suena justo el ajuste, deja una discusión pendiente que no va al fondo de muchos asuntos y opta por lo más fácil.
Cobra sentido el aumento de la gasolina hoy, por la coyuntura de los bajos precios del petróleo. El asunto aunque es tema pendiente, gana terreno ahora. El aumento también cobra sentido en esta coyuntura, por un alarmante proceso de contrabando y frente a esto; la solución no es resolver el problema del contrabando que desangra al país y le ofrece una extraordinaria oportunidad de negocio a una oligarquía colombiana que se deja acompañarse con Luis Guisti y Calderón Berti. Frente a esa situación; el gobierno en este caso, puede estar pensando por colocar por esta zona un precio en la gasolina que ronde los precios internacionales. Esto es muy justo pero no va al fondo de la situación[ii].
La “siembra petrolera”, pudo tener el sentido de sacarle provecho a la extracción y poner en un segundo plano la exportación de hidrocarburos.
Venezuela está exportando aproximadamente 2.017 barriles diarios y produce más o menos un total de 299 mil barriles diarios de gasolina para surtir el mercado interno. Si en vez de exportar hidrocarburos, exportamos gasolina y al precio internacional, continuaría siendo justo un ajuste al precio interno, pero eso que llamamos siembra petrolera, tendría hoy más sentido y de verdad estuviéramos frente a una nueva PDVSA, que definitivamente se le reconoce la profunda vocación social que la revolución le asignó, pero que no ha pasado del lugar en que la encontramos: Exportar hidrocarburos.
La producción o extracción de petróleo para el 2013 fue de 2. 017 barriles diario. Imaginemos hoy, que en vez de estar exportando hidrocarburos a menos de 50 dólares el barril, estuviéramos exportando gasolina a más de 170 dólares el barril. El aumento o ajuste aunque justo, no viene con la idea de un redimensionamiento de PDVSA para diversificar su proceso de refinación.
O sea, está como pendiente una revolucionaria nacionalización de PDVSA, pero lo más fácil y papayita es el aumento de la gasolina, que siendo totalmente justo, lleva consigo estas ligeras contradicciones.
Amarantaroja063@gmail.com
@La_DagaRoja
[i] Este viernes 20 de febrero; el Profesor David Paravisini, expuso sus puntos de vistas sobre el aumento de la Gasolina. Enmarcó esta posibilidad dentro del proceso de Guerra Económica. El contenido de su conferencia fue distribuido digitalmente en el momento a los que llevaron pendrive. [ii] En la década de los cuarenta creo, hubo un ajuste de precios que se estableció por entidades. No recuerdo ahora con exactitud la fecha, pero ese evento está registrado en el libro de Rómulo Betancourt. Venezuela, Política y Petróleo, que al momento de redactar este artículo no tengo a mano.