Las magdalenas gustan a todo el mundo, son perfectas para desayunar, merendar o simplemente para darse un capricho a cualquier hora del día. Después de mucho tiempo comiendo magdalenas y muffins de todos los sabores posibles y cupcakes sofisticados con sus complicados glaseados da gusto volver a deleitarse con unas magdalenas como las de antes, con un sabor de los de toda la vida.
Grado de dificultad: Bajo
Tiempo de preparación: 30 minutos + 1 hora
Cantidad: 20 magdalenas
Ingredientes:
- 125 g. de huevos (3 huevos pequeños ó 2 grandes)
- 175 g. de azúcar
- 60 ml. de leche
- 190 ml. de aceite de girasol
- 210 g. de harina
- 5 g. de levadura Royal
- Rallladura de un limón
- Canela en polvo
- Una pizca de sal
Preparación:
Batimos los huevos con el azúcar hasta que la mezcla crezca y blanquee. Añadir la leche y el aceite en hilito y batiendo a la misma vez para que se incorporen perfectamente. Tamizamos la harina, la levadura, la ralladura de limón, la canela y sal y se la añadimos a la masa, batimos durante 3-4 minutos hasta que esté lisa y sin grumos. Dejamos reposar la masa tapada en la nevera al menos 1 hora, se puede dejar toda la noche si os viene mejor.Precalentamos el horno a 250ºC con ventilador y mientras se calienta vamos llenando los moldes de las magdalenas, es importante para que queden bien llenar de masa 3/4 partes de los moldes. Horneamos a 220ºC durante 12 minutos.Para que las magdalenas queden bien altitas es importante que la masa haya reposado en la nevera un mínimo de 1 hora pues el contraste de temperatura las ayuda a subir; también es importante que los moldes sean duros para que no se abran o sino meterlos dentro de las bandejas metálicas de muffins; y otra paso muy importante es precalentar el horno a fuego muy fuerte.
Fuente de la receta: Pan de Xavier Barriga