Mala nota para el gobierno porteño en materia de espacios verdes
Publicado el 04 septiembre 2013 por Hernanhaines
El fin de semana
estuve nuevamente en el Parque Tres de Febrero, ubicado en el barrio de
Palermo. Se trata de un lugar en donde suele reunirse mucha gente con la
finalidad de realizar algún deporte, tomar sol, caminar o, simplemente, como esparcimiento.
Lo que no deja de
llamar la atención es el estado de ese espacio verde. Mientras el Rosedal está
enrejado y no se puede acceder a él, el resto está en pésimas condiciones.
Por caso, los “espacios
verdes” que rodean al Rosedal son zonas cubiertas por pasto seco y tierra. Es
allí en donde los visitantes pueden sentarse a tomar mate, jugar a la pelota,
disfrutar del sol y otros.
Mientras tanto, desde
el gobierno de la ciudad de Buenos Aires, se hace hincapié en la política “verde”
que llevan adelante. ¿En dónde está esa política de metrópoli verde? ¿En un
Rosedal vedado al público?
Es muy fácil llenarse
la boca y decir que si los bosques de Palermo no están en condiciones es por
culpa de la gente. Allí casi no hay tarros de basura ni personas indicando en
dónde está permitido o prohibido esparcirse. Los espacios verdes tampoco son
mantenidos, cuidados ni regados. Por eso, lo que sobra es pasto seco y tierra.
Pero el Parque Tres de
Febrero no es la única víctima de la pésima gestión verde que lleva adelante el
gobierno de Mauricio Macri. Es fácil verlo en otras plazas, parques, bulevares
y hasta en la manera de administrar el tema de la basura.
El bulevar de la calle
Charcas, entre Av. Coronel Díaz y Salguero, es un claro ejemplo. Lo arreglaron,
lo llenaron de césped, lo enrejaron, pero nunca lo cuidaron. Conclusión: hoy es
pura tierra (mirá la foto que está más abajo). Eso sí, día por medio pasa un
señor con una especie de secador de pelo gigante para desparramar las hojas que
caen de los árboles.
Volviendo al tema de
la basura, en el diario La Nación de hoy hay una excelente nota sobre lo que
está sucediendo con los flamantes contenedores para residuos. Aporto un dato
más: los mastodontes negros fueron ubicados a la sans façon, es decir, así nomás. Lo vi con mis propios ojos.
De igual modo, se pintó de amarillo los alrededores de cada recipiente de
basura, aunque parece que emplearon alguna tintura lavable dado que a los pocos
días, ésta había desaparecido. ¿Cuántos miles de litros de pintura que ya no está pagamos
los porteños?
Ahora, el
ministro de Ambiente y Espacio Público de la CABA, Diego Santilli, fue
premiados con una candidatura a senador nacional. Escolta a Gabriela Michetti.
¿Si su gestión fue magra, por qué votarlo para que ocupe una banca en la cámara
alta durante 6 años?