Nuevo cierre rápido para ruedas y sillín de bicicletas resultante de una patente de la empresa fabricante. La innovación consiste en que el cierre lleva una cerradura que estando bloqueada se puede circular, lo cual le diferencia de todos los demás.
La idea es que las piezas que más se roban de las bicicletas estén siempre protegidas con cerradura, lo cual dificulta el hurto y supone una gran comodidad al no tener que estar quitando y poniendo más y más cadenas cada vez que se usa la bicicleta. Ni si quiera hay que girar la llave para circular. Desde que se instala solo hay que girar la llave para regular el sillín o en caso de pinchazo.
La instalación es de lo más sencilla, simplemente se sustituyen los cierres rápidos que lleva la bicicleta por los nuevos antirrobos. Que a diferencia de los demás cierres es muy fácil encontrar la presión de ajuste necesaria o deseada.
Fabricado totalmente aquí, solo pesa 42 gramos.
En caso de robo de la bicicleta, no la podrán vender porque el comprador querrá la llave, y será más fácil demostrar quién es el propietario en depósitos policiales.
Además el ladrón preferirá una sin cerradura en los ejes y el sillín.
Es un dispositivo muy necesario en el mercado puesto que hay una gran cantidad de robos de estas piezas y no hay nada tan cómodo ni tan disuasorio ya que se fabrica con materiales a prueba de golpes e intentos de apertura.
Ocupa un vacio en la seguridad de las piezas que más se roban de las bicicletas ya que no existe nada que con la cerradura bloqueada se pueda circular.
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