Esta humilde reflexión, pone de manifiesto, los malos tiempos que corren para el llamado indie español y son el reflejo de la doble cara de una misma moneda. Y en nuestras manos está el poder cambiarlos: músicos, productores, promotores, periodistas, reseñistas, público amante de esta música…, porque si no, se no van a ir por el desagüe de la cañería la mejor generación de músicos que este país ha tenido en toda su historia.
Ángel Silvelo Gabriel.