Mamás… ¡toca filosofía de andar por casa!

Por Mamaquesabe @mamaqsabe

¿Sabéis qué es lo que se nos da genial a las madres? Vivir el presente con nuestros hijos, saborear cada ratito por sencillo que parezca, escuchar el sonido del hoy y sentir el tacto del momento. Si me apuráis, hasta conseguimos parar el reloj en ciertos instantes para deleitarnos con algo que nos está apasionando. Estoy segura de que ya os han llegado varios “flashback” de vuestros momentos más emotivos, ¿a que sí? Porque recordar ese pasado que ha marcado un momento muy importante en nuestras vidas también se nos da muy bien. ¿Pero qué ocurre con el futuro? ¿Cuál es nuestra visión de futuro en la maternidad? No sé vosotras, pero yo aquí tiro de muuuucha filosofía… porque como me mueva pensando a futuro me daría un patatús.

A mí la visión a futuro se me daba muy mal cuando era joven. Tuve una época en la que me agobiaba y generaba ansiedad, y luego pasé a probar el opuesto viviendo el presente sin pensar en el futuro. Pero los años y las experiencias me enseñaron que debía aprovechar lo que había aprendido para encontrar mi propio equilibrio, así que… hoy inauguro una nueva sección con el título ¡FILOSOFÍA DE ANDAR POR CASA! (por eso de que suena a reflexión, pero de esa aplicada a lo cotidiano, a la vida vivida y no a la vida pensada…) Es de los pocos legados que les podré dejar con más autenticidad a mis hijos.

El presente es tan efímero que merece ser disfrutado apasionadamente, de forma intensa, sin dejar escapar detalles… pero sabiendo que inmediatamente será parte de un pasado. Por eso me gusta asegurarme de tener un presente genial  y que lo tengan mis hijos (o al menos sentirlo así) y que por lo tanto el pasado sea tan bueno como para tenerlo siempre presente marcándonos el futuro. El futuro no me preocupa sabiendo que estoy trabajándolo en presente. Vendrá como consecuencia. Eso me relaja. Me hace disfrutar de la maternidad.

Siempre le digo a mi hijo mayor que no tenga prisa para nada, porque el futuro es la suma de presentes que hacen que el pasado dé origen al futuro que desea; que solo se preocupe de hacer de su presente lo mejor que pueda y sepa con las circunstancias del momento. Recuerdo las veces que me dijo que “él no podía”… ¡y aquí estamos ahora saboreamos juntos el “haber podido”! Así, le quito ansiedad con el camino diario y le transmito la seguridad y confianza de que su futuro ya lo está construyendo sin necesidad de anticiparlo antes de tiempo.

Los 3 primeros años ni sabía de la existencia de una filosofía de andar por casa, pero casi 7 años después me han otorgado el cinturón maternal de ESQUIVAESQUIVALOTÓ (a los conflictos, me refiero) Es asignatura de libre elección en esta escuela de Padres, ¡pero te dan muuuuuchos créditos para convalidar!

Esa es nuestra filosofía de andar por casa de cara al futuro. ¡Mañana vamos con la lección práctica al toque de humor! Y ya sabéis: Mamás, niños… ¡toca filosofía de andar por casa!

¡Feliz semana!