Características:
Antiséptico, antiespasmódico, carminativo, digestivo, diurético (suave), laxante (suave), sedante, estimulante (digestivo y linfático) y tónico. Desprende un olor suave y sutil, y se aconseja para añadir al baño de los niños y a los tratamientos rutinarios del cuidado de la piel.
El aceite de mandarina es calmante, revitalizante y tonificante. Contribuye, asimismo, a mejorar la circulación y, por tanto, es un buen ingrediente para los aceites y lociones corporales.
Es revitalizante y también resulta efectivo en casos de insomnio y tensión nerviosa.
Antiespasmódico, carminativo, drenador, celulitis, sistema linfático, obesidad, retención de líquidos.
Sistema nervioso: insomnio, tensión nerviosa, inquietud. Se emplea a menudo para los niños y las mujeres embarazadas, y se recomienda en combinaciones sinérgicas con otros aceites cítricos.
Sistema Circulatorio: retención de líquidos, obesidad.
Sistema Digestivo: problemas digestivos, dispepsia, hipo, problemas intestinales, dispepsia,
Piel:acné, pieles congestionadas y pieles grasas, cicatrices, granos, estrías, tonificante
Emocional: sedante, insomnio, histeria, shock emocional, estrés.