Mandela era más que un líder, era la encarnación tangible de una humanidad cada vez más etérea. Se ha marchado dejando como legado la democracia en su país natal, una pelea incansable para combatir el Sida y el ´apartheid´, se ha convertido en un ejemplo a seguir para toda el África Negra y un icono mundial de libertad, valentía, y humildad. Ni la política le corrompió, ni años de injusto encarcelamiento mermaron un ápice su amor hacia los demás.
Descansa en paz y gracias por regalarnos lecciones de vida de incalculable valor. Gracias a ti ahora sabemos que “los verdaderos líderes deben estar dispuestos a sacrificarlo todo por la libertad de su pueblo” y desgraciadamente, los nuestros sólo luchan por sus intereses personales menoscabando cada vez más nuestros derechos. Somos conocedores de que "una nación no debe juzgarse por cómo trata a sus ciudadanos con mejor posición, sino por cómo trata a los que tienen poco o nada", pero diariamente los más poderosos se empeñan de hacernos creer lo contrario. También sabemos que “la educación es el arma más poderosa que puedes usar para cambiar el mundo” auqnue Wert se esfuerza en destrozar la nuestra con leyes en las perdemos casi todos y sólo ganan unos pocos. Conozco aquello de que "nadie nace odiando a otra persona por el color de su piel, o su origen, o su religión
", pero la sociedad nos corrompe cada día y muchos viven en sus propias carnes las terribles consecuencias. Sigo luchando cada día por "una prensa crítica, independiente y de investigación que sea el elemento vital de cualquier democracia", aunque en el camino suframos los reveses de los que más perjudicados salen por el buen hacer de nuestro trabajo. Por ti sigo creyendo que "ser libre no es solamente desamarrarse las propias cadenas, sino vivir en una forma que respete y mejore la libertad de los demás”, pese a que diariamente somos testigos y víctimas de que aún nos queda un largo camino por recorrer.Y además, tus palabras alimentan mis fuerzas de seguir adelante cada día luchando por lo que quiero y en lo que creo. Aunque cueste, aunque duela. Porque "la mayor gloria no es caer, sino levantarse siempre
" y "después de escalar una gran colina, uno se encuentra sólo con que hay muchas más colinas que escalar". Sin parar, sin desfallecer. Siempre adelante y con el corazón en la mano. Ahora sé que "el valiente no es quien no siente miedo, sino aquel que conquista ese miedo". Y yo soy valiente. Hoy y hasta siempre. Hasta que llegue el día de mi muerte. Una muerte que a ti te ha llegado ya porque como tu bien dijiste... "es algo inevitable..."."Cuando un hombre ha hecho lo que él considera como su deber para con su pueblo y su país, puede descansar en paz. Creo que he hecho ese esfuerzo y que, por lo tanto, dormiré para la eternidad"Por Sergio Mata