Más de 5.000 personas según la Policía, y 8.000 según la organización, tomaron las calles de la capital vallisoletana esta tarde desde las 19 horas, protestando en contra del Pacto del Euro, que se firmará en las próximas semanas.
La manifestación transcurrió sin ningún incidente, bajo un calor que no frenó los ánimos.
Desde la Plaza de Colón partieron pasadas las siete de la tarde, a un ritmo lento que luego cogió vida, siguiendo por Miguel Íscar hasta la Plaza de España, donde giraron hacia Duque de la Victoria e hicieron una pitada frente a la sede del Banco de España. Continuaron hacia la Plaza Mayor, donde llegaron a llenar más de la mitad de su superficie, haciendo una sentada hasta pasadas las 21 horas, y leyeron un manifiesto, exponiendo los motivos que les han llevado a protestar.
Se podían ver pancartas e insignias de todo tipo. Desde las de siempre, ya, de “Sin casa, sin trabajo...” hasta las que versaban sobre el tema que les había echado a la calle: la firma de un acuerdo a nivel europeo, temiendo lo que se viene haciendo durante toda la crisis, a escala nacional: aumentar los impuestos, de manera que acaban pagando más los que menos tienen, y mayores recortes sociales, educativos, sanitarios y culturales.
Nada queda ya de aquel movimiento de “jóvenes y perroflautas” que insistían en denominar algunos medios. Miles de personas de todas las edades, ideologías y raza se han echado a las calles, hartas de una situación cada vez más insostenible, tanto a nivel económico como social.
Y han demostrado, una vez más, que son una corriente pacífica, que nada tiene que ver con lo ocurrido el otro día frente al Parlament en Barcelona. Aunque contra esto no se oyeron palabras, a pesar de que ha habido algún medio que ha asociado a lo pasado en Cataluña con esta convocatoria (que llevaba semanas gestándose).
En resumen, una muestra más de que, un mes después, el espíritu del 15M, lejos de extinguirse como algunos desearían, sigue más vigente que nunca. Y es que de tanto llamar al pueblo “indignados” e intentar desacreditarle, lo único que se ha conseguido es avivar la chispa de la revolución.
Os dejamos con una pequeña galería, previa al especial fotográfico que esperamos poder poner en breves.