Maniobras de distracción

Por Rubenportas
Antes de iniciaros en esta entrada, os pediré que visiteis esta otra entrada que colgué hace un tiempo y que os ayudará a saber de qué hablamos hoy y de la magnitud del desastre. Sé que puede dar pereza pero las imágenes impactantes os harán entender a qué me refiero.

Asociaciones como Filón Verde, Montaña de Babia y Luna y la Plataforma para la Defensa de la Cordillera Cantábrica, (entre otras) llevan años denunciando la destrucción del valle de Laciana por el negocio de la minería a cielo abierto (negocio para unos pocos, que quede desde el principio bien claro).Durante estos últimos años, la Comisión Europea y los diferentes tribunales dictaron continuas sentencias relacionadas con la ilegalidad de las explotaciones, tanto por ocupar territorios sin permiso ni autorizaciones, como por contaminación de ríos y destrozo de los recursos naturales imprescindibles para los habitantes locales (entre los que se hallan incluso los propios obreros de dichas explotaciones).


Victorino Alonso es el empresario cabecilla de toda esta destrucción a manos de diferentes empresas que crea y destruye para evadir impuestos, percibir subvenciones y un largo etc. No me extenderé mucho para explicaros quién es este personaje porque hay información abundante y muy interesante en la web. Podéis verlo en la wikipedia, en una entrada sobre el señor oscuro del blog amigo del Alto Sil, o en este vídeo. Pero si os diré que este hombre consciente de todo lo que estaba (y está) haciendo y, sus hazañas son defendidas por los alcaldes de los gobiernos locales. Victorino Alonso es el artífice creador de la expresión "a la brava" que no tiene otro significado que "O me dáis los permisos para horadar, destruir, explotar y enriquecerme destruyendo vuestro territorio y echar a mis obreros al paro para que os presionen cuando me toqueis las narices o tendré que hacerlo a la brava, osea, sin el consentimiento legal..."Obviamente, tarde o temprano los tribunales le acaban dando la razón a quienes luchan por preservar su entorno, a quienes saben que la minería a cielo abierto es pan para hoy y hambre para mañana, a quienes no quieren ver aniquiladas sus montañas y destruidos los sueños de vivir en ese paraiso bien conservado. 

A pesar de ello, la táctica seguida por el empresario minero siempre fué la misma: hacer caso omiso a las sentencias que obligan la paralización de la actividad minera y presionar tanto a los políticos de los ayuntamientos locales como de la comunidad. No en vano tiene apoyo incondicional de la Junta de Castilla y León que defiende la destrucción de hábitats protegidos que albergan especies amenazadas como podéis ver en este enlace y este otro. Incluso los periodistas se ponen del lado de la minería con noticias tan poco rigurosas y contrastadas como esta. Afortunadamente, siempre hay artículos buenos y acertados para quienes no conocen la situación real como el blog de Mario Quevedo y la tribuna de Rolando Rodríguez de la cual me inspiré para el título de esta entrada.

Llamas de Laciana, una belleza sin minas...

En este caso la destrucción minera en Fonfría

Puede resultar esta una historia digna de una película mafiosa y no es para menos..pero en este caso la realidad supera la ficción! 
Tenemos un territorio que está siendo saqueado y destruido, un todopoderoso que ignora tribunales y es apoyado por los políticos (como podéis ver en este enlace) porque éstes son presionados por las gentes de esos pueblos cuando éstas, a su vez, son amenazadas con el desempleo cada vez que señor oscuro ve afectados sus intereses. Los obreros que, desgraciadamente no tienen otro método de vida (porque sus políticos no fueron capaces de explotar de otro modo los valiosos recursos naturales existentes en Laciana y no tuvieron las agallas necesarias para pararle los pies a Victorino Alonso) salen a la calle a reclamar su pan de distintos modos algunos incomprehensibles. 
Como véis, es una pescadilla que se muerde la cola y que la administración no se atreve a solucionar porque las condenas europeas las acabaremos pagando todos los ciudadanos.  

Existen soluciones! Si, las hay! Por ejemplo, podemos citar que el empresario minero está obligado a medidas compensatorias como la restauración de las zonas ya "explotadas" (que hubiesen generado 100 puestos de empleo durante estos últimos 10 años).
Podéis observar en la imagen como se está realizando actualmente dicha restauración.

Zonas de la explotación minera supuestamente ya restauradas

La voz de la cordura a quién la justicia da la razón la ponen las asociaciones Filón Verde y Montaña de Babia y Luna cuyos miembros no son ecologistas de salón ajenos a la realidad de lo que sucede (como muchos podrían pensar) sino que algunos han sufrido la minería en sus propias carnes y son habitantes de los mismos pueblos que rodean tal devastación. Estas personas están siendo ahora mismo perseguidas y acosadas por denunciar la situación que os comento y que no es otra que la paralización cautelar de la mina Nueva Julia que se halla en pleno corazón del hábitat del amenazadísimo Urogallo cantábrico y, ante la cual el empresario minero actuó con un ere que afecta a más de 60 trabajadores locales.
Debemos decidirnos entre seguir con la minería y acabar devastando Laciana convirtiéndola en una escombrera y llegar a una situación irremediable o detener la minería a cielo abierto, buscar un futuro para estas gentes invirtiendo los millones de euros que cobró el empresario (en subvenciones públicas a lo largo de estos años) en restaurar el medio actualmente afectado y poder darle un futuro a los hijos de Laciana.
¿Políticos, a qué coño esperáis?
Como desde este humilde blog sólo puedo difundir la dramática situación, os aconsejo que leais el artículo en este enlace escrito por quienes llevan luchando y sufriendo tantos años. Os ruego a todos los lectores la misma difusión.
Para los más escépticos, podéis contrastar toda la información que aporto en esta página web y este enlace.
Un saludo y gracias por leer el blog!