“Una mujer prometida resulta siempre más agradable que una sin compromiso. Ya está satisfecha de sí misma. Para ella no existen más preocupaciones, y sabe que puede ejercer todo su poder de atracción sin despertar sospechas. Con una mujer prometida todo está a salvo, no hay daño posible.”
Después de haber leído tres libros de Jane Austen (Orgullo y prejuicio, Sentido y sensibilidad y Emma) creía que ya no me iba a sorprender más, pero me equivocaba. He encontrado en Mansfield Park una historia completamente diferente a las anteriores mencionadas. Aunque en un principio parece que la historia se va a centrar en Fanny Price, la niña acogida y sobrina de sir Thomas y Lady Bertram, en realidad muestra los acontecimientos que van sucediendo mientras Fanny va creciendo: su visión ante ellos, cómo éstos van madurando su forma de ser y sus consecuencias. Además de vivir junto a sus tíos, forman parte de Mansfield Park sus primos Tom, Edmund, Maria y Julia. También contaran con la presencia de Mrs. Norris, hermana de Lady Bertram y tía de Fanny, y los Grant, pertenecientes a la casa parroquial de Mansfield; con la llegada de los hermanos Crawford, Henry y Mary, la vida en la mansión ya no será lo que era.
Jane Austen narra la historia de tal manera que la acción transcurre como si los lectores fuéramos Fanny Price, observando lo mismo que ella. Ésto sucede hasta que que poco a poco Fanny se separa del lector y éste observa su propia evolución dentro de la trama. Ella es totalmente diferente a las otras mujeres de Austen: callada, tímida y se rige rigurosamente por los buenos modales y la cortesía. En algunos momentos no he estado nada de acuerdo con su actitud pero si no lo hubiera hecho, no hubiera sido Fanny, es decir, no hubiera sido creíble. Los personajes que la envuelven, su propia familia, son muy peculiares. Salvo Fanny y Edmund, encontraba al resto muy odiosos. Egoístas, prepotentes e hipócritas, él destaca por ser el único que comprende, escucha y apoya a Fanny. Edmund os sorprenderá y, si me permitís, os conquistará. Como un día dijo Matt, aunque con otras palabras, si tanto nos encandiló Darcy era porque no conocíamos a Edmund, y yo estoy bastante de acuerdo con él. Darcy es Darcy, pero Edmund es un encanto de hombre. A lo largo de la novela todos evolucionan, lo que va sucediendo hace que con algunos yo misma cambiara de opinión y les tuviera un poco más de simpatía (salvo Mrs. Norris, qué mujer más insoportable).
Jane Austen con su exquisita y maravillosa pluma te hace vivir y suspirar por la historia. Para ser un clásico, a los que a veces hay que estar más atento, las páginas se me pasaban volando. Reconozco que al principio me sentí perdida pero pronto me dejé llevar y la disfruté como la escritora sabe hacerlo. Ya he comentado que Mansfield Park es una novela que poco se puede parecer a las que ya había leído. Una vez más, el tema del matrimonio está muy presente, pero en este caso también forma parte el tema de la iglesia y el de la infidelidad. Me ha sorprendido gratamente la incursión de éste último porque era la primera vez que veía cómo la sociedad de aquella época actuaba ante ello, así como sus consecuencias, y personalmente me ha parecido muy interesante.
Ahora ya sólo me queda decir: ¿el próximo será La abadía de Northanger o Persuasión?
“¿Qué pueden hacer sir Thomas y Edmund juntos… qué hacen por la felicidad, el bienestar, la dignidad y el prestigio social de Fanny, comparado con lo que yo haré?”