Para que no te vuelva a pasar, aquí tienes unos cuantos consejos que te pueden ser de utilidad. Aquí van:
Antes de...
Lee las instrucciones de uso y cuidado de las prendas antes de comprarlas y usarlas, así no te llevarás sorpresas.
Durante el uso...
Lava el bikini o bañador cada vez que te lo pongas. El cloro, la sal y las cremas solares dañan el tejido de tu ropa de baño, así que debes eliminarlos tras cada postura.
Utiliza agua fría y un detergente suave (Norit o cualquier otro para ropa delicada; también sirve el gel de baño). Puedes añadirle un poco de suavizante.
La plancha, lejos, lejos.
Después...
Guarda los bikinis y bañadores bien limpios y secos, o tendrás una sorpresa desagradable cuando los saques el año que viene.
Y, ahora, ya te puedes tirar a la piscina tranquilamente... :)