Para saber si le conviene a una empresa, es interesante analizar las debilidades y fortalezas de este tipo de mantenimiento:
Puntos fuertes:
- Es un método riguroso y auditable, por lo que aporta una garantía adicional ante terceros
- Hace un especial hincapié en la seguridad y protección del medio ambiente
- Contempla todas las mantecnologías actuales, luego es un método totalmente vigente
- Implica a todo el personal
- Exterioriza y evidencia, no solo las mejoras en el mantenimiento, sino problemas colaterales: falta de documentación, información, etc.
- En principio tiene que mejorar la fiabilidad del equipo o sistemas.
- Sirve para definir actuaciones de mejora difíciles de identificar por otros métodos.
- Es un método basado en la experiencia de los participantes, por lo que se pueden presentar serios problemas para llevarlo a cabo internamente con equipos y sistemas nuevos.
- El éxito del proceso depende de la capacidad de liderazgo del guía y de la predisposición al cambio y motivación de los participantes, por lo que es básico analizar antes la situación sociolaboral, el momento, etc.
- Es un proceso arduo y lento, por lo que la estrategia de implantación debe ser cuidadosa para no desmoralizar a los participantes.
- En organizaciones rígidas, la racionalización final puede desembocar en una mínimas mejoras en cuanto a costes y disponibilidades.
- El conocimiento de nuevas tecnologías (sobre todo predictivas) es importante, pues, en su defecto, el grupo de trabajo cae con gran facilidad en volver a definir un nuevo Plan solo preventivo sistemático.
Un saludo.