¿Ha sido Papá Noel generoso en vuestras casas? Y, lo que es más importante ¿ha acertado?
Tanto si los regalos que ha dejado han sido un éxito como si no, estoy segura de que los días de Navidad a veces se os hacen tan largos como a nosotros. Así que hoy os traigo otra manualidad de Navidad para hacer con niños súper fácil. Tan fácil que casi no sé si llamarla manualidad pero si con ello os doy una idea, bienvenido sea, ¿no?
Hace unos días os explicaba cómo hacer adornos de Navidad con palitos de madera de tipo helado (o depresores, que también se llaman así). Pues bien, la manualidad navideña de hoy es todavía más facilita.
Hoy vamos a hacer
¡Un Árbol de Navidad con rollos de papel!
¿Qué necesitamos para hacer nuestro Árbol de Navidad?
- Al menos 3 rollos de papel higiénico terminados.
- Pinturas tipo témpera. Como os contaba en la manualidad anterior, nosotros tenemos un set de Crayola que nos encanta (por lo bien que pigmenta y lo bien que se lavaba de la ropa, la mesa, la cara y el pelo) pero puede ser cualquiera que tengáis en casa.
- Unas tijeras con punta afilada.
- Pegamento, por ejemplo cola blanca. La cola blanca de Giotto es buenísima pero podéis usar cualquiera que tengáis por casa. En Tiger, que hay muchos por Madrid, suelen tener.
- Pinceles. Nosotros tenemos este set, que tiene pinceles de todo tipo, desde los grandes para pintar superficies grandes hasta los pequeños para hacer detalles que requieren mayor precisión. Pero usad los que tengáis por casa.
¿Cómo lo hacemos?
Pues ya os digo que es facilísimo.
1.- Para preparar nuestro árbol tenemos que cortar los rollos de papel higiénico terminados para formar una pirámide.
Para poder cortar los rollos sin destrozarlos vamos a necesitar una tijera que tenga punta, para poder clavar la punta antes de cortar. Así que este paso casi mejor que lo haga un adulto si los niños son pequeños.
Uno de los rollos lo cortamos por la mitad. Una de las mitades la usaremos como tronco base y la otra mitad será la copa del árbol.
Al siguiente rollo de papel le quitaremos solamente 1/3.
En la foto podéis ver cómo hemos colocado una base (la que Mayor está pintando de marrón) y luego tres piezas de diferente ancho: un rollo de papel higiénico entero, otro al que le hemos quitado 1/3 y otro que corresponde a la mitad de un rollo.
2.- Pegar los rollos de papel higiénico formando una pirámide, con un tronco en la base. En la foto superior lo véis.
No hace falta poner mucho pegamento que si no se nos desparrama todo. Además, vais a ver que pega enseguida con una gotita que echemos.
3.- Empieza lo bueno: ¡a pintar!
Nosotros pintamos la base de marrón y las ramas de verde. Pero hacedlo siempre a vuestro gusto.
No os paséis con la pintura porque si mojáis mucho el cartón se va a ablandar. Controlad la cantidad de pintura.
4.- La más divertida: ¡decorar!
Una vez que tenemos seco el tronco y las ramas, podemos decorar el Árbol de Navidad a nuestro gusto.
Podéis hacer bolitas como las del árbol de verdad, pintar guirnaldas o pegar espumillón, también podéis pegar pompones, echar purpurina, ponerle unos botones de colores… ¡lo que se os ocurra!
5.- Dejar secar. Si lo ponéis en un radiador en un segundo está seco.
Resultado de nuestra manualidad: Árbol de Navidad listo
Una vez seco, para que se sostenga de pie, podéis usar masilla adhesiva reutilizable, que nosotros la utilizamos para todo.
Sí, se nos ha colado un reno entre los dos árboles. Y es que nos sobraba un rollo de papel y se nos ocurrió la idea sobre la marcha. Los cuernos se los hicimos con unos recortes sobrantes de haber preparado el árbol. Queda mono también, ¿no?
En fin, ya véis que la manualidad es súper sencilla y nos sirve para pasar un rato de lo más entretenido, reutilizar materiales y, de paso, decorar la casa. Ya veis que las nuestras no son manualidades Pinterest, pero las ganas se las ponemos igual.
Si os animáis a hacer esta manualidad de Navidad para niños, por fi, enseñadme vuestro Árbol de Navidad con rollos de papel, ¡me encantará verlo!