Manzanilla Pasada Barón

Por Guillermo Manuel De Villena
Manzanilla Pasada Barón
Bodegas Barón
D.O. Jerez y Manzanilla de Sanlúcar
De nuevo, un vino del Marco de Jerez se cuela por esta ventana para recordarnos que siguen estando ahí, aunque la gente no los conozca, que siguen estando ahí aunque la gente no los consuma. 
Esta manzanilla ya la descubrí hace tiempo, y está entre mis 5 favoritas. Lo primero que me llamó la atención es que viene en botella troncocónica, la de hombros anchos, más típica de vinos tintos, huyendo de la botella jerezana habitual,  y con tapón de corcho. O sea, que va a hacer falta el sacacorchos para abrirla.Las Bodegas Barón, aunque no sean tan conocidas como otras, llevan desde 1895, con cascos bodegueros incluso más antiguos, y unas 140 Ha. de viñedos propios, y desde hace unos años sus nuevos propietarios están dándole un nuevo empujón a esta firma sanluqueña.Lo de Manzanilla Pasada ya hubo alguien, alguna lectora, que me preguntó que significaba. Pues, simplemente, le dije, que era una manzanilla con más años de crianza que las habituales. Si hoy en día hay manzanillas finas (es decir, más jovenes) con 3, 4 años de crianza, pues ésta tiene unos 7, aproximadamente. En los vinos de Jerez siempre se debe hablar de crianza media, o aproximada, debido al tradicional sistema de crianza.
De todos modos las manzanillas pasadas actuales distan mucho de lo que fueron cuando Antonio Barbadillo dijo:"..."la edad máxima para mantener una Manzanilla en FINO, con más de 20 clases y ajustando bien las sacas y el vacío de las botas de crianza, se puede llevar en promedio hasta 15 años; después, la flor no persiste todo el año, por falta de nutrientes y aumento del grado alcohólico y se PASA, de ahí el nombre de MANZANILLA PASADA con que se denominó a estos vinos, y aún hoy se llama así a algunos vinos, sin serlos".(Nota: Clases son escalas en la criadera).
Pero están buenísimas cuando hay un plato de Jamón Ibérico de Bellota cerca.
Verán al servir la copa que tiene un color algo más amarillo dorado que las  comerciales manzanillas cuasitransparentes e hipermegafiltradas, a las que le han quitado casi toda la gracia. Fíjense esos reflejos dorados laterales. En nariz es mucho más intensa, punzante, con notas de almendra amarga. Y al probarla ya ni les cuento. Se nota que tiene algo más de cuerpo, las notas salinas son más claras y el final muy largo - persistente, se dice - es decir,  que el sabor dura mucho tiempo en la boca.