Estos en concreto son los pinceles que yo elegí de la línea profesional y que como vereis están en perfecto estado con su manta para guardarlos en terciopelo.
Eran los más básicos y que me permitían ( ahora también) multitud de opciones para aplicar el maquillaje. No llevan numeración como los que hay ahora de la misma línea y conservan aún el logo de la marca. Llevan mucho uso y limpieza y no me han soltado un pelo en los 14 años que llevan conmigo.
Tienen muy buena calidad; se nota en durabilidad, suavidad, en que no se les cae el pelo en resistencia soportando limpieza y trabajos exhaustivos y también en el precio que son bastante más económicos en comparación con otras marcas con más publicidad.
Limpieza: Siempre los he lavado con fairy y después desinfectado con alcohol de 96 grados.
Como veis me falta algún pincel para rostro pero esos os los enseñaré en otra entrada junto con nuevos pinceles que estoy adquiriendo poco a poco.
Pincel lengua: Es de pelo de marta y sirve para aplicar sombras, pigmentos, difuminar también se puede usar mojados y con productos en crema.
Pincel recto: de pelo de marta y sirve para aplicar sombra, difuminar productos en crema y polvo, hacer un trazo más grueso, diseñar la banana.
Pincel abanico de Toray (nylon): sirve para hacer un barrido de partículas que se caen en la piel cuando se realiza el maquillaje sin estropearlo ni mancharlo.
Pincel de eye liner: de pelo de marta para líquido y crema.
Pincel biselado de pelo de pahmi: es de pelo corto y firme. Sirve para dar mayor precisión a la hora de aplicar tanto productos en polvo, como en crema en el párpado inferior o en exterior del ojo y el diseño de cejas.
Pincel de labios: es de pelo de marta. Sirve para perfilar, difuminar y rellenar o aplicar el corrector en crema.
Pincel goupillon: de cerdas sintéticas. Sirve para peinar las cejas y pestañas y aplicar la máscara de pestañas. Como veis está para cambiarle el cabezal.
Bueno, espero que os haya gustado y que podáis apreciar el valor que tienen para mi.
¡Hasta la próxima!