1. Investigá los tipos de texturas de los productos que vas a usar.
Las pieles son todas diferentes: algunas más secas, otras grasas, con o sin arrugas. Y los maquillajes tienen varios tipos de texturas que son mejores para algunas necesidades y no se recomiendan para otros.Por ejemplo:- Las pieles grasas necesitan texturas en polvo, livianas tipo suero, matificantes. Los polvos ayudan a evitar brillos indeseados.
- Pieles secas y maduras: texturas cremosas, con ingredientes hidratantes. Eviten los acabados mate o polvos.
- Los productos en barra pueden ir para todos los tipos de piel.