Desde temprana hora, procedentes de todas las comunidades de influencia zapatista de las regiones Norte, Selva y Altos, miles de indígenas se desplazaron hacia la ciudad colonial para darse cita en el Centro Indígena de Capacitación Integral (CIDECI), en una movilización no vista desde el año 2005, cuando dieron inicio a la Otra Campaña.
Durante la concentración para sumarse al llamado de cese a la violencia, un vehículo repleto de encapuchados procedente del municipio de Ocosingo, volcó a la altura de Huixtán, reportándose la muerte de una persona y varios heridos.
Antes del mediodía, los zapatistas, quienes ya sobrepasaban los 12 mil asistentes, caminaron con pancartas y lanzando consignas contra las acciones del gobierno federal, coreaban “estamos hasta la madre de políticos que no tienen madre”. Momentos después, guardaron silencio e iniciaron una marcha coordinada hacia la Plaza Catedral.
En ese lugar, el comandante David tomó la palabra y se dirigió hacia los más de 25 mil indígenas que abarrotaban el lugar y calles aledañas donde enfatizó que los gobiernos que impone su razón propia sólo divide y confronta por su incapacidad, amparándose en la “ley” y la fuerza pública [podeís leer el comunicado completo en http://javiersoriaj.wordpress.com/2011/05/08/palabras-del-ezln-en-la-movilizacion-de-apoyo-a-la-marcha-nacional-por-la-paz-7-mayo-2011/].
Sin embargo, continuó el líder rebelde, sólo se ha garantizado la impunidad a través de la “ley” y la fuerza ha sido corrompida y utilizada para calumniar, perseguir, encarcelar y matar a quienes cuestionan y se oponen a las políticas violentas empleadas en la lucha contra la delincuencia organizada.
“Tener miedo de la palabra de la gente y ver en cada crítica, duda, cuestionamientos o reclamos un intento de derrocamiento, es algo propio de dictadores y tiranos“, empero, saber escuchar al pueblo en sus reclamos justos “es virtud de gente sabia y honesta“.
A nombre del ejército insurgente e indígenas chiapanecos, el comandante David refrendó su solidaridad con los familiares de los niños víctimas del incendio de la guardería ABC, Javier Sicilia y los afectados por las 40 mil víctimas abatidas en México durante el presente sexenio.
“Hoy estamos aquí para decirles sencillamente a esas buenas personas que en silencio caminan, que no están solos. Que escuchamos el dolor de su silencio, como antes la digna rabia de sus palabras. Que en su alto a la guerra, que en su no más sangre, que en su estamos hasta la madre ¡no están solos”, expresó el jefe militar del EZLN.
Finalmente, alrededor de las 19 horas de este sábado, los miles de zapatistas concentrados en la Plaza Catedral se retiraron en silencio, abordaron los más de 600 vehículos que los transportó hasta San Cristóbal y, en silencio, regresaron a sus comunidades, tal como anunció el sub comandante Marcos en una carta dirigida al poeta Javier Sicilia.
(Hermes Chávez • Milenio, 8 de mayo de 2011)