Nada mejor para empezar que leer las palabras de José Saramago en 1994:
Un país como Portugal, y no es el único en esta situación, que no tiene una idea propia de futuro para toda la colectividad, vive en una situación de total dependencia. No tenemos más ideas que las que nos dicen que debemos tener. La Unión Europea nos dicta lo que debemos hacer en todos los órdenes de la vida. Nos encaminamos hacia la peor de las muertes: la muerte por falta de voluntad, por abdicación. Esta renuncia es también la muerte de la cultura. Por eso creo que un país muerto, como Portugal, no puede hacer una cultura viva.Avancemos algo en el tiempo y veamos lo que Esperanza Aguirre decía de Irlanda hace unos años, en un artículo titulado "Globalización y lucha contra la pobreza" publicado por El País el 1 de agosto de 2006 (la negrita es mía):
“José Saramago: ‘El mundo se está quedando ciego”, La Verdad, Murcia, 15 de marzo de 1994
La libertad económica y el libre comercio internacional han sido, son y serán siempre mucho más eficaces en la lucha contra la pobreza que el intervencionismo, el nacionalismo económico o cualquier variedad conocida o por conocer del populismo, del socialismo o del comunismo.
(…) Vale la pena citar el caso de Irlanda: hace sólo 25 años, Irlanda era uno de los países más pobres de la Unión Europea. Sin embargo, hoy, en 2006, Irlanda es el país más rico de la Unión Europea, tras Luxemburgo. Hasta el punto de que Irlanda, que desde el siglo XIX siempre había sido un país de emigrantes, se ha convertido en país de acogida de inmigrantes. Y este milagro económico tuvo su origen en políticas liberales. Es decir, en las bajadas de impuestos, en los recortes del gasto público, en el equilibrio presupuestario, en la liberalización de la economía y en la apertura a las inversiones extranjeras y al comercio internacional.
Mi compañero Kabila nos recuerda otro refán ("Cuando las barbas de tu vecino veas cortar...") y confirma que, efectivamente, en Irlanda, donde ha operado el neoliberalismo al más alto nivel, se bajaron impuestos sobre todo a las empresas, se dejaron las operaciones financieras sin gravar y sin embargo tampoco se ha salvado. Aquella política de barra libre fiscal la tenemos que pagar ahora con recortes sociales, pues los mismos que no supieron poner coto a los desmanes del mercado quieren ahora imponer sus recetas a las clases más débiles.
Voy a compartir la recopilación de Ángel González de dibujos de El Roto sobre la crisis, que me parece toda una entretenida lección de economía:
La Crisis Vista Por El RotoView more presentations from Angel Gonzalez.
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