"Soy diputada de la Asamblea y lo seré hasta que el pueblo lo quiera", dijo la parlamentaria advirtiendo que no acatará sentencia del TSJ
"Yo soy diputada porque lo han querido ustedes, los venezolanos, el pueblo, desde luego sabemos que hay una confabulación de los poderes públicos que han cometido todo tipo de atropellos en estos años y en estos días contra la ciudadanía, y ahora se pretende callar mi voz".
"Acudiré a la Asamblea Nacional, y ejerceré mi derecho, aún con los riesgos que ello implica", dijo Machado, cuyo cargo como diputada fue puesto en duda la semana pasada por el presidente del Parlamento, Diosdado Cabello, con el argumento de que al presentarse ella en la OEA como embajadora alterna de Panamá, había quedado destituida por "violar la Constitución".
Aseguró que su inspiración está en la gente "que lucha con fuerza en la calle y ahora hay más razones, esto es un atropello más".
Expresó que la sentencia del TSJ "no me hace ser ni una pizca menos diputada, por el contrario con más fuerza estaré hoy en la calle acompañando a mis electores, a mis conciudadanos”.
El máximo tribunal aseguró que la participación en la OEA por parte de la dirigente radical "no solo va en desmedro de la función legislativa para la cual fue previamente electo o electa, sino en franca contradicción con los deberes como venezolana" y "como diputada a la Asamblea Nacional (Parlamento)".
En el fallo se justifica la decisión de desplazar de su banca a Machado, en los artículos 191 y 197 el Texto Fundamental, los cuales señalan que "los diputados o diputadas a la Asamblea Nacional no podrán aceptar o ejercer cargos públicos sin perder su investidura, salvo en actividades docentes, académicas, accidentales o asistenciales, así como dispone que los mismos están obligados y obligadas a cumplir sus labores a dedicación exclusiva, en beneficio de los intereses del pueblo".
El TSJ además citó el artículo 149, que establece que "los funcionarios públicos no podrán aceptar cargos, honores o recompensas de gobiernos extranjeros sin la autorización de la Asamblea Nacional".
La diputada negó las acusaciones y, en declaraciones a la prensa, señaló que "en absoluto" aceptó un cargo diplomático panameño. "En la OEA no ejercí un cargo, sino el derecho a tomar la palabra a través de un mecanismo que contempla la normativa de ese foro", precisó.