Les presentamos a esta nereida de pelo color azabache. Su sinuosa figura y su carita de “yo no fui” es la mezcla perfecta entre el eros y el tánatos. Acercarse a ella es una experiencia exquisita, pero no te pases de la raya, porque esos ojitos dulces pueden fulminarte con una sola mirada. Celebramos la Semana Santa con esta pecadora que te hará morder la manzana del deseo. Lo único que